Llevar un perro a nuestro hogar es algo que no se debe subestimar. Todo animal necesita espacio, cuidados y atención. Por lo tanto, cuando tomamos esta decisión, debemos estar muy bien preparados y elegir a nuestro amigo canino en función de las posibilidades que tengamos. Siendo así, veamos las 3 razas de perros que sería mejor no tener en casa.
Husky Siberiano
Es un animal completamente de territorios de nieve, por ello no es exactamente el más apropiado para un hogar, especialmente si tienes niños. El husky siberiano ama la atención, el afecto y los abrazos. Este carácter propio de ellos podría llevarlos a sentirse en competencia con los niños. Además, es un perro de trineo y le fascina correr al aire libre. Un espacio totalmente cerrado podría asfixiarlo y ponerlo triste y amargado.
Pastor Australiano
Es un perro altamente enérgico, le encanta el movimiento, estar al aire libre y necesita paseos interminables para mantenerse sano. Sin estas actividades, es probable que tenga problemas de comportamiento bastante graves. Igualmente, es un perro al que le gusta la rutina, no le gustan los extraños y no permite que alguien que no conoce entre a casa. En conclusión, es un perro exigente. Para poder disfrutar de sus grandiosas cualidades, lo mejor es tener una casa muy grande con jardín, donde pueda encontrar su tranquilidad.
Galgo
El Galgo es conocido por su magnífica velocidad y la gran energía que libera en sus carreras, tanto que, con frecuencia, es entrenado para competiciones. Este canino siente la necesidad de moverse constantemente. Necesita un gran espacio para poder sacar su energía y estar en paz. Además, no es muy tierno y prefiere estar tranquilo y pacífico. Por lo que, una casa, una familia o unos niños, no son adecuados para él.
