El mandatario lleva meses reclamando ambas acciones, que cree indispensables en este momento en el que el mundo debe enviar un mensaje claro de que Rusia no ganará la guerra
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, se pronunció este jueves ante los líderes de la Unión Europea e insistió, una vez más, en sus demandas por envíos de armamento y la habilitación del uso en su favor de los fondos rusos congelados.
Durante su discurso emitido por video ante los asistentes a la cumbre de dos días que se desarrolla en Bruselas, el mandatario sostuvo que es fundamental que, en este momento más que nunca, los aliados europeos agilicen los suministros de ayuda antiaérea y municiones varias, para asegurar que Rusia pierda en este guerra.
“Tenemos que tener claro nuestro objetivo común europeo. Es el mismo que desde el principio: el sistema ruso debe perder en esta guerra contra Ucrania” y no se puede enviar un mensaje que deje dudas de esto ya que la agresión de Moscú es también una ofensiva contra “toda Europa y el modo de vida europeo”.
Frente a las limitaciones que los aliados muchas veces enfrentan a la hora de mandar las armas, Zelensky propuso meses atrás la utilización de los beneficios y de los propios activos rusos que fueron congelados desde febrero de 2022, en favor de su lucha, el rearme de sus diezmadas Fuerzas Armadas y la reconstrucción de su país.
“Necesitamos avanzar en el uso justo de los activos congelados de Rusia. El agresor debe pagar el precio más alto por la guerra (y) esto se ajusta tanto a la letra como al espíritu de la ley. Este año, debemos utilizar los activos rusos para proteger y restaurar la vida en Ucrania. Rusia debe sentir el costo real de la guerra y la necesidad de una paz justa”, explicó en ese sentido.
“Es justo que tanto los beneficios de los activos rusos como los mismos activos sirvan para reconstruir Ucrania después de las hostilidades, para apoyar a Ucrania y, en parte, para comprar armas para parar el terrorismo”, concluyó el mandatario.
La víspera, la Comisión Europea propuso utilizar los beneficios extraordinarios de este dinero, que ascienden a unos 3.000 millones de euros anuales, en el financiamiento de armas y munición para Kiev. El 90% estaría destinado este mismo año al suministro de equipos militares a través del fondo de asistencia para Ucrania dentro del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz (FEAP), mientras que el 10% restante se integraría en el presupuesto general de la UE, comentaron fuentes cercanas a la reunión.
“La transferencia de fondos se haría dos veces al año porque la financiación se necesita urgentemente, empezando a mediados de este mismo año”, agregaron mientras el alto representante para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, comentó que “es una señal clara de que (Rusia) se ve a sí mismo en guerra con todo Occidente”.
En medio de estas declaraciones, el primer ministro ucraniano, Denis Shmigal, envió un mensaje en su canal de Telegram en el que estimó que la nación necesitará unos USD 500.000 millones para poder recuperarse de los daños que el Ejército enemigo provocó con sus ataques en los últimos dos años.
También, en las últimas horas, mantuvo un encuentro con los líderes del Atlantic Council y del Instituto Hoover, dos think tanks estadounidenses, y les compartió “los motivos económicos, políticos y legales” que respaldan “la confiscación tanto de los activos soberanos de Rusia como de oligarcas”.
“Rusia debe pagar. Trabajamos con expertos y socios para implementar ese principio” que, agregó, podría incluir un nuevo “impuesto especial sobre los recursos rusos”, como el petróleo o el gas, una vez que el conflicto bélico acabe.
FUENTE / INFOBAE