TORONTO — Drake tuvo una noche mucho mejor que Blake. Los Blue Jays y su público pueden no estar tan llenos de estrellas como los muy favorecidos Dodgers, pero el equipo conocido por su gran profundidad en la alineación y bateo de contacto superior envió un mensaje decisivo al castigar a la pitada de Dodgers. Esto incluye al aclamado as Blake Snell, que había estado casi perfecto en octubre.
El Rogers Centre vibró, y el equipo menos favorecido advirtió que esto no será fácil para los Dodgers de 400 millones de dólares, que ganaron nueve de 10 juegos mientras avanzaban por una eliminatoria de la Liga Nacional que se veía como la prueba más grande. Eso resultó ser pan comido para LA; esto fue algo completamente diferente.
En cambio, fue un impulso de confianza para un equipo balanceado de Jays que es mejor de lo que pensamos (¡recuerden cómo desmantelaron a los Yankees en la Serie Divisional!). Pero la victoria 11-4 de los Jays en el Juego 1 de la Serie Mundial, que incluyó una entrada de nueve carreras y el primer grand slam como bateador emergente en la historia de la Serie Mundial (por Addison Barger), reveló dos cosas importantes y preocupantes sobre los Dodgers también.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**