La más reciente actualización de Windows, conocida como KB5034765, ha generado una serie de dolores de cabeza para numerosos usuarios de Windows 11. Lanzada el pasado 13 de febrero, esta actualización acumulativa prometía mejoras significativas en la funcionalidad del sistema operativo, pero en lugar de eso, ha desencadenado una serie de problemas técnicos que están afectando a una considerable cantidad de sistemas.
Entre los problemas reportados se incluye la desaparición de la barra de tareas, fallos en el explorador de archivos y una reducción en el rendimiento general del sistema. Estos inconvenientes han causado molestias y dificultades en la experiencia de uso de los usuarios afectados, quienes han expresado su frustración en diversos foros en línea y redes sociales.
Además de los problemas mencionados, también se han registrado complicaciones durante el proceso de descarga e instalación del parche, lo que ha llevado a Windows Update a revertir los cambios en algunos casos para restaurar el sistema a su estado anterior. Esta situación ha generado aún más preocupación entre los usuarios que han experimentado problemas con la actualización.
Parche en camino
Microsoft ha reconocido oficialmente estos inconvenientes y ha prometido trabajar en una solución. La actualización KB5034765 estaba destinada a introducir una nueva experiencia de Copilot, reemplazando la función de “mostrar escritorio” en la barra de tareas, así como abordar problemas con el narrador y la descarga de metadatos. Además, se suponía que corregiría 73 vulnerabilidades de seguridad, incluidos cinco errores críticos.
Sin embargo, los problemas técnicos han llevado a que Microsoft recomiende una solución temporal para los usuarios afectados: eliminar la carpeta oculta “\$WinREAgent” antes de intentar realizar la actualización nuevamente. Esta medida se propone para facilitar la instalación de la actualización sin los errores que han estado surgiendo.
Mientras tanto, Microsoft está trabajando en un parche correctivo que esperan lanzar pronto para resolver los problemas causados por la actualización KB5034765. Hasta que este parche esté disponible y se confirme que soluciona los problemas de manera efectiva, se recomienda a los usuarios que aún no han actualizado sus sistemas que eviten hacerlo. Esta precaución se sugiere como medida para evitar posibles inconvenientes en el funcionamiento de sus equipos.
La situación actual refleja uno de los desafíos recurrentes que enfrentan los usuarios de Windows al actualizar su sistema operativo. Si bien las actualizaciones están diseñadas para mejorar la funcionalidad y seguridad del sistema, en ocasiones pueden introducir nuevos problemas que afectan la experiencia de uso de los usuarios. Por tanto, es importante que los fabricantes de software, como Microsoft, aborden rápidamente estos problemas y proporcionen soluciones efectivas para garantizar una experiencia óptima para todos los usuarios de Windows 11.
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