Los principales índices cerraron el martes a la baja en la Bolsa de Valores de Nueva York, dando un cierre opaco a un año que rompió récords en Wall Street.
El S&P 500 dejó ir una ganancia temprana para cerrar con una caída del 0,4%. El índice, que estableció 57 máximos históricos en 2024, acumuló una ganancia del 23,3% en el año. Este fue su segundo año consecutivo con un avance de más del 20%.
La última vez que el índice tuvo una ganancia anual consecutiva tan grande fue en 1998.
El promedio industrial Dow Jones bajó 0,1%, y el compuesto Nasdaq perdió 0,9%.
Las grandes emisoras tecnológicas lideraron la subida de este año, empujando al compuesto Nasdaq a una ganancia anual del 28,6%. El Dow, que tiene mucho menos peso de tecnología, subió 12,9% en el año.
El desempeño de Wall Street en 2024 fue “ciertamente mucho mejor de lo que la mayoría de las personas en Wall Street, incluido yo mismo, pensábamos que obtendríamos este año”, dijo Sam Stovall, estratega jefe de inversiones en CFRA.
El buen rendimiento de los mercados financieros estadounidenses este año ha sido impulsado por una economía en crecimiento, un sólido gasto del consumidor y un fuerte mercado laboral.
Las elevadas cotizaciones de las empresas en el negocio de la inteligencia artificial, como Nvidia y Super Micro Computer, ayudaron a impulsar al mercado a nuevas alturas.
El sólido crecimiento de las ganancias corporativas también ayudó. Wall Street espera que las empresas del S&P 500 reporten un incremento de más del 9% en las utilidades para el año, según FactSet. Las cifras finales se conocerán tras los informes del cuarto trimestre que comienzan en unas pocas semanas.
Otro factor que impulsó el mercado fue que la economía evitó una recesión que muchos en Wall Street temían era inevitable después de que la Reserva Federal aumentara su tasa de interés principal a su nivel más alto en dos décadas con la esperanza de desacelerar la economía con el fin de combatir la elevada inflación.
El retroceso de la inflación, que se ha acercado al objetivo del 2% de la Fed, ayudó a energizar a Wall Street, elevando las esperanzas de que el banco central realice varios recortes de tasas de interés el próximo año, lo que aliviaría los costos de endeudamiento y fomentaría más crecimiento económico.
Sin embargo, después de tres recortes de tasas de interés en 2024, la Fed ha indicado que tomará una postura más cautelosa de cara a 2025, ya que la inflación sigue siendo un problema mientras el país se prepara para que el presidente electo Donald Trump retorne a la Casa Blanca.
Las amenazas de Trump de aumentar los aranceles sobre los bienes importados ha generado preocupación de que la inflación podría reavivarse debido a que las empresas trasladarían a los consumidores los mayores costos causados por dichos aranceles.
La subida de los mercados de este año no fue sólo en las acciones.
Bitcoin, que estaba por debajo de los 17.000 dólares hace sólo dos años, superó los 100.000 dólares por primera vez. Y el oro también rompió récords y acumuló una ganancia de más del 26% en el año.
Sólo alrededor del 38% de las acciones en el S&P 500 cayeron el martes, pero una caída en las acciones tecnológicas lastró las ganancias en otros sectores del mercado.
El gigante de los semiconductores Nvidia, cuya enorme valoración le da una influencia desproporcionada en los índices, cayó 2,3%. Apple bajó 0,7%, y Advanced Micro Devices perdió 1,3%.
Las ganancias en las acciones energéticas ayudaron a moderar algunas de las caídas. Exxon Mobil subió 1,7% y Chevron ganó 1,2%.
A fin de cuentas, el S&P 500 bajó 25,31 puntos el martes y cerró en 5,881.63. El Dow perdió 29,51 puntos para ubicarse en 42.544,22, y el Nasdaq se deslizó 175,99 puntos para terminar en 19.310,79.
Los rendimientos de los bonos fueron mixtos. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años subió de 4,54% a 4,57%. El rendimiento del bono a dos años se mantuvo estable en 4,24%. Los precios del petróleo crudo subieron 1%.