Varias personas tuvieron que ser hospitalizadas después de que un vuelo de United Airlines que se dirigía a Newark en Nueva Jersey fuese desviado ayer a un aeropuerto en el condado Orange de Nueva York debido a turbulencias, y que además ya se estaba quedando sin combustible.
Unos 320 pasajeros y miembros de la tripulación estaban a bordo del vuelo 85 de United Airlines de Tel Aviv a Newark cuando fue desviado al Aeropuerto Internacional Stewart en Newburgh, 70 millas al norte de NYC, alrededor de las 6:45 p.m. del viernes debido a “fuertes vientos y turbulencias”, según los funcionarios.
El avión había sido autorizado a aterrizar en Newark después de su vuelo de 11 horas desde Israel, pero los pilotos dieron una vuelta cuando estaban a unos 750 pies del suelo, debido a los fuertes vientos. Con poco combustible se desviaron a Newburgh donde paramédicos recibieron el vuelo y atendieron a más de dos docenas de personas que se enfermaron en el aire, reportó ABC News.
Los pilotos dijeron a los controladores aéreos que habían experimentado un cambio repentino en la dirección del viento y decidieron abortar el aterrizaje en Newark. Fue entonces cuando el vuelo de rutina se convirtió en una montaña rusa.
“Mi corazón saltó un par de veces. Le estaba enviando mensajes de texto a mi esposa por si acaso”, relató el pasajero Roi Gonen. Agregó que hubo un pánico generalizado y gente vomitando.
Tras el aterrizaje de emergencia siete pasajeros fueron trasladados a Montefiore St. Luke’s Cornwall con heridas leves, algunos de los cuales informaron mareos. Los enfermos más graves fueron a ese hospital de la zona, mientras el avión cargaba combustible para un vuelo rápido y relativamente sin incidentes a Newark.