Santiago. El obispo auxiliar de la arquidiócesis de esta ciudad confirmó que desaprensivos penetraron al parqueo que está entre la catedral y el arzobispado y rompieron cristales de tres vehículos.
Monseñor Carlos Tomás Morel Diplán lamentó dicha acción delincuencial, y dijo que tan pronto informaron a las autoridades policiales el director de policía en Santiago Juan Bautista Jiménez Reinoso asumió las investigaciones. Morel Diplán indicó que los malhechores no robaron nada, debido a que en los vehículos no guardaban objetos de valor.
El religioso lamentó que lugares cerrados, y que entienden son seguros, se convierten en vulnerables para los ladrones, los cuales en su inmensa mayoría quienes protagonizan estos actos son rateros que están inmiscuidos en el mundo de las drogas, más que delincuentes del crimen organizado.
“Son rateros que andan buscando cosas, o descuidistas que deambulan en el centro de la ciudad, para robar y venderlos para comprar drogas, gracias a Dios no hubo más que daños materiales en los vehículos” resaltó Monseñor Carlos Tomás Morel.
Además expresó que en otras ocasiones han ocurrido hechos similares pero se pudieron controlar, por la seguridad que se ha empleado, aunque resalta que los descuidistas están a la orden del día, y son difíciles de controlar, la mayoría son de los denominados piperos.
El obispo auxiliar de la arquidiócesis de Santiago reconoció el trabajo policial sobre todo en el centro de la ciudad y con el patrullaje, pero que la desesperación de los adictos a las drogas, los lleva a hacer este tipo de actos delincuenciales a pesar del trabajo realizado por las autoridades.
En tanto que el padre Pablo Ariel López, de la parroquia de Corpus Cristi, dijo que el daño realizado por los delincuentes hace necesaria más educación en la población para que eviten caer en el mundo de las drogas, al tiempo que agradeció la respuesta de las autoridades policiales.