Un padre de Utah fue acusado de torturar a sus tres hijos pequeños tras llevarlos a una excursión peligrosa en Big Cottonwood Canyon donde desaparecieron y requirieron hospitalización de emergencia. Imágenes de celular captaron el momento en que su hija de 8 años preguntaba: “¿Vamos a morir congelados, papi?”.
Micah Smith, de 31 años, fue arrestado y acusado de abuso infantil agravado y tortura infantil por exponer a sus hijos de 2, 4 y 8 años a condiciones extremas durante la excursión del 11 de octubre.
“Lo que parecía una excursión inocente con sus tres hijos rápidamente se convirtió en una pesadilla cuando el acusado priorizó coronar la montaña sobre la seguridad de los niños”, señaló la acusación judicial.

Smith había informado a sus hijos que realizarían el Sendero Broads Fork, descrito por su hija como una excursión de “9 millas o 9 horas” según documentos judiciales obtenidos por Fox13.
El fiscal del condado de Salt Lake, Sim Gill, afirmó: “No es una excursión fácil para llevar a un niño”. El sendero, clasificado como “exigente” y “difícil” en guías en línea, presenta un recorrido de cinco millas ida y vuelta con un desnivel de 2,100 pies.
La situación se tornó crítica cuando familiares reportaron la desaparición del grupo. Rescatistas localizaron a la familia aproximadamente a 600 pies de la cima, donde habían construido un refugio improvisado con rocas y ramas después de que el hijo menor de Smith sufriera una caída y golpe en la cabeza.
El escenario encontrado por los equipos de rescate era alarmante: el hijo de 4 años yacía inconsciente sobre su hermano de 2 años, aparentemente sin respirar. La acusación reveló que ambos menores vestían ropa insuficiente para las condiciones climáticas.
Smith admitió haber practicado RCP en sus dos hijos menores después de que perdieran el conocimiento y dejaran de respirar. En un momento crítico durante la noche, enseñó a su hija cómo realizar reanimación cardiopulmonar antes de descender solo de la montaña.
Los primeros respondedores transportaron urgentemente a la familia y realizaron 25 minutos de RCP continuos al niño de 4 años durante el descenso.
Testimonios recogidos en la investigación indican que la hija de Smith había intentado advertirle sobre la necesidad de regresar cuando se encontraban a dos millas de la cima, pero fue rápidamente desestimada por su padre. “Esto es algo único en la vida”, habría afirmado Smith antes de impedirle retroceder con un “No pasarás”.
Evidencia digital recuperada muestra mensajes de Smith a su esposa alrededor de las 5:18 p.m., donde minimizaba la situación: “Sí, [el de 4 años] está agutado. Casi estamos en la cima, pero todos comienzan a fallar y está empezando a llover. Me estoy cansando de cargar [al de 2 años]. Es difícil con tres niños y sin un segundo padre”.
El rescate culminó con la hospitalización de los cuatro. Mientras Smith y su hija presentaban condiciones leves y estables respectivamente, los dos hijos menores ingresaron en estado crítico. El niño de cuatro años sufrió un derrame cerebral que requirió cirugía para remover parte de su cráneo. Al ingreso hospitalario, su temperatura corporal registró 62.6°F (17°C), según reportó KTVX.
Smith fue ingresado en la cárcel del condado de Salt Lake el 25 de noviembre y permanece bajo fianza.
Antecedentes preocupantes emergieron durante la investigación: un mes antes del incidente, Smith fue encontrado con dos armas y un hacha mientras intentaba localizar una montaña después de expresar intenciones suicidas. Aseguró a los oficiales que “estaba pasando por un momento muy difícil” pero no se haría daño.
El 10 de noviembre, Smith fue acusado de allanamiento en el Hospital Infantil Primario por intentar interferir con el tratamiento de su hijo de 4 años y manipular equipos médicos, lo que derivó en un arresto adicional por violencia doméstica.
La acusación concluye: “El comportamiento del acusado claramente se está descontrolando, y no solo es un peligro para sí mismo, sino que es un peligro para estas víctimas”.
REDACCIÓN FV MEDIOS


