WASHINGTON — El Comando Sur de Estados Unidos exhibió este lunes, mediante una serie de fotografías, los ejercicios de aproximadamente 2.200 marines que entrenan en el Caribe. La publicación coincide con el aumento de presión de la administración Trump sobre el gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro.
Las imágenes, correspondientes a la 22ª Unidad Expedicionaria de Marines, muestran a las tropas en ejercicios de fuego real con sistemas de mortero durante maniobras de “reconocimiento, selección y ocupación de posición”. También se las ve entrenando con drones de ataque en Puerto Rico y realizando operaciones a bordo del buque de asalto anfibio USS Iwo Jima en el Mar Caribe.
Las fotografías —tomadas entre el 20 de noviembre y el 16 de diciembre— reflejan “una fuerza lista para el combate” en un contexto de creciente presión sobre Maduro, según señaló Alex Plitsas, del Atlantic Council, a The Post. “Está destinado a demostrar capacidad, y en algunos casos, también puede ser una señal para los adversarios”, afirmó.
No obstante, el ex oficial de inteligencia estadounidense y veterano de la guerra de Irak aclaró que un contingente de 2.200 efectivos es insuficiente para una invasión terrestre que derroque por la fuerza a Maduro y garantice la estabilidad posterior. “Es más presión para tratar de que renuncie… pero parece que la administración todavía está tratando de que [Maduro] renuncie voluntariamente sin tener que tomar medidas militares”, señaló Plitsas, estimando que se necesitarían unos 100.000 soldados para una invasión.
Aun así, el experto no descartó la posibilidad de ataques aéreos contra objetivos terrestres, opción que el presidente Trump ha mencionado en varias ocasiones.
La difusión de estas imágenes se produce días después de que el secretario de Estado, Marco Rubio, declarara que el gobierno de Maduro —al que acusa de narcoterrorismo y de albergar terroristas de Hezbollah— representa “la amenaza número uno” para la seguridad estadounidense en el hemisferio occidental. “El statu quo con el régimen venezolano es intolerable para Estados Unidos”, afirmó Rubio en una conferencia de prensa de fin de año, dejando clara la postura de Washington que busca la salida de Maduro.
“El régimen ilegítimo en Venezuela… invita a Hezbollah e Irán a operar desde su territorio [y] también permite que [los grupos terroristas colombianos] ELN y los disidentes de las FARC no solo operen desde dentro del territorio venezolano, sino que controlen territorio venezolano sin obstáculos”, añadió.
En paralelo, la Guardia Costera de Estados Unidos persigue a un petrolero frente a las costas de Venezuela, acusado de participar en envíos ilícitos de petróleo del “mercado negro” vinculados al gobierno de Maduro.
Se cree que el buque navega bajo bandera falsa y está sujeto a una orden judicial de incautación de Estados Unidos. Fue avistado en aguas internacionales del Mar Caribe y ha sido rastreado por los militares desde al menos el domingo. De ser incautado, sería el tercer petrolero interceptado por fuerzas estadounidenses en menos de dos semanas.
La Casa Blanca ha defendido esta postura agresiva como parte de un esfuerzo más amplio para cortar las fuentes de ingresos de Maduro, a quien acusa de utilizar las ventas de petróleo para financiar a narcotraficantes y otras redes criminales. Los funcionarios caracterizan a estos petroleros como parte de una “flota fantasma” que socava las sanciones internacionales y las reglas energéticas globales.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**