WASHINGTON (AP) — El Ejército de Estados Unidos identificó este lunes a los dos miembros de la Guardia Nacional de Iowa fallecidos en un ataque durante el fin de semana, atribuido por las autoridades al grupo Estado Islámico en Siria. Se trata del Sargento Edgar Brian Torres-Tovar, de 25 años, de Des Moines, y el Sargento William Nathaniel Howard, de 29 años, de Marshalltown.
La gobernadora de Iowa, Kim Reynolds, ordenó que todas las banderas en el estado ondeen a media asta en su honor, afirmando que “estamos agradecidos por su servicio y profundamente lamentamos su pérdida”.
El portavoz del Pentágono, Sean Parnell, informó que un intérprete civil que trabajaba para EE.UU. también falleció. Otros tres miembros de la Guardia resultaron heridos en el ataque, según la Guardia Nacional de Iowa: dos en condición estable y uno en buena condición.
El ataque representa una prueba importante para el acercamiento entre Estados Unidos y Siria, tras la expulsión del líder Bashar al-Assad hace un año, y ocurre mientras el ejército estadounidense expande su cooperación con las fuerzas de seguridad sirias. Cientos de tropas estadounidenses están desplegadas en el este de Siria como parte de una coalición que combate al Estado Islámico.
El tiroteo del sábado en el desierto sirio, cerca de la histórica ciudad de Palmira, también hirió a miembros de las fuerzas de seguridad locales y terminó con la muerte del pistolero. Un funcionario sirio indicó que el agresor se había unido a las fuerzas de seguridad internas como guardia de seguridad de una base hace dos meses y recientemente fue reasignado ante sospechas de afiliación al Estado Islámico.
El hombre irrumpió en una reunión entre funcionarios de seguridad estadounidenses y sirios que almorzaban juntos y abrió fuego después de enfrentarse con guardias sirios, declaró el domingo el portavoz del Ministerio del Interior, Nour al-Din al-Baba.
Al-Baba reconoció que el incidente fue “una gran brecha de seguridad”, pero afirmó que en el año transcurrido desde la caída de al-Assad, “ha habido muchos más éxitos que fracasos” por parte de las fuerzas de seguridad.
El Ejército señaló este lunes que el incidente está bajo investigación, aunque funcionarios militares han atribuido el ataque a un miembro del Estado Islámico.
El presidente Donald Trump afirmó durante el fin de semana que “habrá una represalia muy seria” por el ataque y que el presidente sirio, Ahmed al-Sharaa, estaba “devastado por lo sucedido”, enfatizando que Siria lucha junto a las tropas estadounidenses. Trump recibió a al-Sharaa, quien lideró la insurgencia que derrocó al gobierno de al-Assad, en la Casa Blanca para una reunión histórica el mes pasado.
Torres-Tovar y Howard eran soldados dedicados y “miembros apreciados” de la familia de la Guardia Nacional de Iowa, declaró Stephen Osborn, general adjunto, en un comunicado. “Nuestro enfoque ahora es brindar apoyo inquebrantable a sus familias durante este tiempo inimaginable y asegurar que el legado de estos dos héroes nunca sea olvidado”, añadió.
Howard había querido ser soldado desde niño, según Jeffrey Bunn, padrastro de Howard y jefe del Departamento de Policía de la Nación Meskwaki en Tama, Iowa. Howard “amaba lo que hacía y sería el primero en entrar y el último en salir”, escribió Bunn el sábado por la noche en la página de Facebook del departamento.
Howard también era un esposo amoroso y un “hombre de fe increíble”, dijo Bunn, y agregó que el hermano menor de Howard, un sargento de personal en la Guardia de Iowa, escoltaría a “Nate” de regreso a Iowa.
Según una publicación de abril en una página de Facebook dedicada a compartir historias de la unidad, Howard se inspiró en el servicio de su abuelo y deseaba servir durante 20 años. Ya había cumplido más de 11 años de servicio. Howard “quiere que sus compañeros de batalla sepan que él siempre está ahí”, decía la publicación, “ya sea para ayudar o simplemente para escuchar”.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**