Marcelo Bielsa sabía bien la reacción mundial tras un Uruguay-Brasil en el que se abusó del juego áspero por los cuartos de final de la Copa América, con los dos clásicos rivales combinándose para 41 faltas, cuatro remates a puerta y cero goles en el tiempo reglamentario.
Bielsa admitió que no hubo fútbol bonito la noche del sábado, pero al técnico argentino de Uruguay únicamente le importaban las celebraciones en el país y las gradas de Las Vegas tras la victoria de la Celeste.
Con Sergio Rochet (el arquero que tapó el primer lanzamiento) y Manuel Ugarte (autor del remate decisivo) como protagonistas, Uruguay avanzó a las semifinales de la Copa América con una victoria 4-2 en la tanda de penales tras un 0-0 en el tiempo reglamentario.
Uruguay y Brasil se enfrascaron en una batalla de pierna fuerte, dejando a un lado la expectativa de fútbol atractivo que se había generado. El volante uruguayo Nahitan Nández fue expulsado a los 74 minutos con un brutal pisotón sobre Rodrygo. En inferioridad numérica, Uruguay supo resistir en los siguientes 21 minutos de acción.
“No puedo ignorar que me atrae mucho más atacar que defender, pero también tengo que valorar que en un partido cerrado creamos una opción más que el rival y defendimos bien, jugando 15 minutos con un jugador menos”, sostuvo Bielsa. “Eso a este nivel se nota mucho”.
En el año y resto que lleva como entrenador del seleccionado celeste, Bielsa le ha imprimido al equipo un modelo diferente, con una marcada vocación de ataque, asfixiar al oponente con una presión constante y trasladar el balón con lucidez.
Pero Bielsa no tuvo reparos en apelar a la legendaria garra charrúa que le ha dado a Uruguay -el país de algo de 3 millones de habitantes- un par de campeonatos mundiales y 15 títulos de la Copa América.
“Todo lo que sucede es a la uruguaya”, indicó Bielsa. “Son los jugadores los que le dan perfil. El partido fue muy disputado, muy cerrado, parejo y con pocos cambios de dominio”.
“Después, con un hombre menos, nos resignamos a defender en nuestro campo, pero no sufrimos situaciones de gol en todo el segundo tiempo”, añadió. “Es verdad que aferrarse a un resultado como lo ha hecho el equipo uruguayo hoy, denota un perfil del fútbol uruguayo”.
Después de la tercera definición por penales en los cuartos de final del torneo continental, Uruguay avanzó para citarse con Colombia en una semifinal que se jugará el miércoles en Charlotte.
A primera hora del sábado, en el desierto de Arizona, Colombia siguió su magnífico paso en Estados Unidos propinándole una goleada 5-0 a Panamá, para extender a 27 su racha de partidos sin perder.
“El partido con Colombia será tan exigente como el de hoy (sábado) porque es un equipo que viene evolucionando muchísimo partido a partido”, indicó Bielsa.
La campeona defensora Argentina se las verá contra Canadá en la otra semifinal que se jugará el martes en Nueva Jersey. La final será el 14 de julio en Miami Gardens.
Uruguay se instaló en la semifinales de la Copa América por primera vez desde que se coronó campeón en 2011 y dejó fuera a Brasil por primera vez en cuatro intentos desde 1995.
“Colombia también tiene muchos delanteros importantes y en cada posición, pero confiamos en que estamos en condiciones de poder jugar en un plano de igualdad con cualquier rival”, remarcó Bielsa.
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