Viajar en avión puede ser una experiencia desafiante, especialmente cuando hay niños inquietos a bordo. En una historia que se ha vuelto viral, un padre tomó una acción drástica para lidiar con un niño que no dejaba de molestar a su hija durante un vuelo nocturno. La forma en que manejó la situación ha generado elogios y debates en línea.
La molestia del niño que pateaba el asiento
La historia comienza con una joven de 14 años que viajaba de vuelta a casa desde la India junto a su padre. Estaban ansiosos por descansar durante el vuelo nocturno, pero su sueño se vio interrumpido por un niño de aproximadamente 9 o 10 años que viajaba detrás de ellos.
El joven comenzó a patear el asiento de la hija sin parar, a pesar de que su padre le pidió amablemente que se detuviera. Incluso cuando le volvieron a pedir que se detuviera, de manera más firme esta vez, el niño no hizo caso.
Ante la persistencia del niño, el padre tomó una decisión drástica. Reclinó su asiento por completo, limitando el espacio del molesto niño. Cuando los padres del niño le pidieron al padre que subiera el asiento, él se negó.
Esto llevó a que los padres llamaran a la asistente de vuelo, pero ella respaldó la acción del padre, habiendo notado el comportamiento del niño. La asistente confirmó que el padre tenía todo el derecho de mantener su asiento reclinado.
Los padres del niño parecían molestos y comenzaron a murmurar maldiciones, pero no pudieron hacer nada más. Finalmente, lograron que su hijo dejara de patear el asiento, pero siguieron mirando con enojo al padre, a su hija y a la asistente de vuelo.
El padre mantuvo el asiento reclinado durante aproximadamente una hora, asegurándose de que los padres del niño hubieran aprendido la lección. Luego se levantó, satisfecho de haber logrado su objetivo.
Elogios y críticas en línea
La historia compartida por la hija en Reddit ha generado todo tipo de reacciones en línea. Muchos usuarios han elogiado la acción del padre, considerándola una «venganza despiadada» justa y merecida. Algunos incluso han sugerido que el padre debería haber esperado a que los padres tuvieran bebidas (preferiblemente frías) antes de reclinar rápidamente su asiento.
Sin embargo, también ha habido algunas críticas, con algunos usuarios cuestionando si la acción del padre fue la más apropiada. Algunos han argumentado que, en su lugar, deberían haber hablado con los padres de una manera más constructiva.
La lección clave es que, a veces, las personas necesitan experimentar las consecuencias de sus acciones para entender realmente el impacto que tienen en los demás. Aunque la venganza del padre pudo haber sido «despiadada», logró detener el mal comportamiento del niño y hacer que los padres asumieran su responsabilidad.