Redacción.- Un juez brasileño ordenó este jueves a Youtube y al presidente del país, Luiz Inácio Lula da Silva, sacar del aire el video del acto que encabezó el mandatario en São Paulo con motivo del Primero de Mayo por “propaganda electoral anticipada”.
El juez Paulo Eduardo de Almeida, del Tribunal Regional Electoral de São Paulo, aceptó una denuncia del partido derechista Novo en el que solicitó la retirada del video en el que Lula pide el voto para el diputado izquierdista Guilherme Boulos, aspirante a la Alcaldía de São Paulo.
Para el magistrado “no caben dudas de que la permanencia del video en la red podría empañar la paridad entre los posibles candidatos a las próximas elecciones” municipales de octubre, al tratarse de un evento fuera de los tiempos establecidos para la campaña y por contar con la presencia de una figura políticamente relevante como Lula.
En ese acto, celebrado en el aparcamiento del estadio Neo Química Arena de São Paulo, en el proletario barrio de Itaquera, el jefe del Estado pidió expresamente el voto para Boulos ante cientos de simpatizantes y sindicalistas.
Ese tipo de comentarios electorales antes del inicio de la campaña, previsto para agosto, son ilegales y se castigan en Brasil con multas de entre 5.000 y 25.000 reales (de 1.000 a 5.000 dólares).
“Nadie derrotará a este joven si votan a Boulos para alcalde de São Paulo en las próximas elecciones”, expresó el gobernante de 78 años durante el acto, que fue transmitido en directo por los canales oficiales del Gobierno.
En este contexto, el juez ordenó notificar a Youtube para que retire el video “en un plazo de 48 horas” y al Presidente para que también lo elimine de sus perfiles, en caso de que la plataforma aún no lo haya sacado del aire. Marina Helena, precandidata de Novo a la Alcaldía de São Paulo y autora de la denuncia, celebró el fallo en sus redes sociales y dijo que fue “evidente el uso de la maquinaria pública” que se hizo para “fines electoralistas”.
La política conservadora adelantó que también pondrán una demanda a Lula ante el Ministerio Público por “abuso de poder para fines electorales” y “uso ilegal de la máquina pública”. Las elecciones municipales de octubre, en las que se renovarán los alcaldes y concejales de 5.568 municipios, se asoman como un nuevo duelo entre el progresismo que lidera Lula y la ultraderecha que encarna el expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022), inhabilitado por ocho años tras difundir bulos y deslegitimar las instituciones democráticas
