¿Alguna vez has escuchado a alguien tronarse el cuello o los nudillos? Es posible que lo hayas presenciado en tus colegas de trabajo o incluso lo hayas hecho tú mismo. Esta práctica es común y muchas personas lo hacen de forma habitual, argumentando que tronarse el cuello o los nudillos es una forma de relajar las articulaciones, prepararse para una actividad física intensa o simplemente un hábito.
Sin embargo, hay quienes sostienen que esta práctica puede ser perjudicial para el organismo, e incluso conducir a problemas como la artritis, fracturas o lesiones irreparables.
El sonido de las articulaciones al tronarse
Para comprender por qué las articulaciones emiten un sonido cuando son tronadas, es importante conocer la estructura de estas. Según el médico josé mena, especialista intervencionista de la columna en miami orthopedics & sports medicine institute, el ruido que se produce al tronarse las articulaciones proviene del reventar de las burbujas de nitrógeno que se forman en los espacios entre las articulaciones. Estas burbujas se generan naturalmente en el líquido sinovial, que actúa como lubricante y nutriente para las articulaciones.
Cuando realizamos un movimiento rápido o aplicamos presión sobre una articulación, las burbujas de nitrógeno estallan, produciendo el sonido característico. Es importante destacar que el tronarse las articulaciones no causa un daño inmediato a los nervios, ligamentos o huesos.
Tronarse el cuello y los nudillos: ¿Causa de artritis?
A pesar de la creencia popular, no existe evidencia científica que respalde la afirmación de que tronarse el cuello o los nudillos cause artritis. Varios estudios han investigado esta relación y no han encontrado ningún vínculo directo entre la práctica de tronarse las articulaciones y un mayor riesgo de desarrollar artritis. Sin embargo, es importante tener en cuenta que las personas que ya han sido diagnosticadas con artritis deberían evitar tronarse las articulaciones para prevenir posibles traumatismos adicionales o lesiones en las articulaciones debilitadas.
Los riesgos del tronarse el cuello
Aunque tronarse el cuello no ha sido directamente relacionado con la artritis, existen algunos riesgos asociados con esta práctica, especialmente cuando se trata del cuello. Aaron kubal, quiropráctico, advierte que el cuello es una zona delicada que alberga arterias y nervios importantes. Aunque las posibilidades son mínimas, hay una pequeña probabilidad de que un movimiento brusco al tronarse el cuello pueda causar un ictus vertebrobasilar, una condición grave que afecta el flujo sanguíneo al cerebro. Dado que no existen pruebas de que tronarse el cuello alivie el dolor en esta área, kubal sugiere evitar esta práctica para prevenir posibles complicaciones.
Riesgos asociados con traumatismos y lesiones
Si bien el tronarse el cuello en condiciones normales no representa un peligro inmediato para la salud, existen situaciones en las que los sonidos articulares pueden indicar un problema subyacente. Por ejemplo, si los sonidos articulares van acompañados de dolor intenso o inflamación, podría ser señal de una lesión o trauma en las articulaciones. En estos casos, es recomendable consultar con un médico para obtener un diagnóstico adecuado y recibir el tratamiento adecuado.
Recomendaciones
En resumen, tronarse el cuello o los nudillos es una práctica común que generalmente no representa un riesgo para la salud. El sonido que se produce al tronar las articulaciones proviene de las burbujas de nitrógeno que se encuentran en el líquido sinovial.
Aunque no hay evidencia científica que respalde la idea de que tronarse el cuello o los nudillos cause artritis, las personas con artritis existente deben evitar esta práctica para prevenir daños adicionales en las articulaciones debilitadas. Sin embargo, es importante tener precaución al tronarse el cuello, ya que existe un pequeño riesgo de complicaciones, especialmente relacionadas con el flujo sanguíneo al cerebro. Si experimentas dolor intenso, inflamación o cualquier otro síntoma preocupante después de tronarte las articulaciones, es recomendable buscar atención médica para una evaluación adecuada.