El cáncer es la segunda causa de muerte en el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS); en 2018 ocasionó 9,6 millones de muertes, es decir uno de cada seis fallecimientos.
Los tipos de cáncer más comunes en los hombres son el pulmonar, prostático, colorrectal, estomacal y hepático, y entre las mujeres el mamario, colorrectal, pulmonar, cervical y tiroideo. El 50% de las personas diagnosticadas con cáncer se encuentran ya en etapas avanzadas de la enfermedad, lo que complica significativamente el tratamiento y las posibilidades de sobrevivencia.
A este panorama se suman las proyecciones, que no resultan especialmente alentadoras. Hace dos días la OMS junto a la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés) estimó que para 2050 habrá más de 35 millones de nuevos casos de cáncer, lo que representa un aumento del 77% respecto de los 20 millones de casos detectados en 2022, y advirtió que el tabaco, el alcohol y la obesidad “son factores clave” detrás del rápido crecimiento de esta enfermedad.
En este marco, la prevención es una de las llaves para bajar estas negras estadísticas y otra, cuando ya la enfermedad está presente, es el diagnóstico temprano, lo que juega un papel crucial en la lucha contra el cáncer, ya que se estima un 90% de las personas a quienes se lo detecta a tiempo logra superar la enfermedad.
El test “no pretende reemplazar el control por imagen, sino todo lo contrario, complementarlo», dijo Simian (EFE/Nathalia Aguilar) (EPA) EFE
Sin embargo, una gran proporción de las muertes, calculada en el 71%, ocurre en casos de cánceres para los cuales no existe un método de detección precoz establecido. Esta falta de medios de screening o tamizaje eficientes subraya la importancia de la investigación y el desarrollo de nuevas técnicas de diagnóstico que puedan salvar vidas reduciendo la cantidad de resultados positivos en etapas tardías.
“Uno de los principales factores que determina las probabilidades de sobrevivir al cáncer es el momento de la detección de la enfermedad. Se estima que en el mundo 9 millones de vidas se pierden año tras año como consecuencia de no detectar la enfermedad a tiempo”, remarcó, en diálogo con Infobae Marina Simian, doctora en Biología e investigadora del CONICET en cáncer de mama, con más de 25 años de experiencia en el mundo académico, y líder de Oncoliq, la startup argentina que está desarrollando el primer test que permitirá detectar varios tipos de tumores con un análisis de sangre.
“Hoy en día sabemos que entre el 40% y el 50% de las personas adultas tendrán cáncer en algún momento de su vida, y que, con las tecnologías actuales, la mitad de las personas reciben un diagnóstico tardío, lo que implica que la mayoría de estos pacientes va a vivir menos de 5 años”, explicó. De estos datos se desprende que “una de las estrategias para combatir la mortalidad temprana del cáncer es detectar la enfermedad de manera rápida. Esto trae aparejado grandes beneficios para los pacientes, entre ellos, aumentar la efectividad de las terapias o poder convertir la enfermedad para que se vuelva crónica”.
“Tenemos previsto lanzar al mercado el test de detección de cáncer de mama en marzo de 2025. En lo que respecta a los cuatro restantes, aún seguimos trabajando”, subrayó (Freepik)
Los investigadores de Oncoliq están desarrollando el primer test que permitirá detectar hasta 50 tipos de cáncer a partir de una muestra de sangre. Los expertos que trabajan en esta investigación señalan que una de las singularidades de este análisis es que ya se ha probado que alcanzará un 90% de sensibilidad.
Este screening —es decir un test que detecta la enfermedad en individuos sin signos o síntomas— “no pretende reemplazar el control por imagen, sino todo lo contrario, complementarlo, pero sobre todo, llegar a cualquier rincón del mundo, facilitando la detección temprana con un control de bajo costo y poco invasivo para el paciente”, explicó Simian.
La experta precisó que, si bien la meta es hallar de manera temprana 50 tumores diferentes, actualmente los investigadores están concentrados en desarrollar “la tecnología para detectar cáncer de mama, próstata, vejiga, endometrio y riñón. Su elección no es azarosa, ya que estos tipos de cáncer son los más frecuentes en la población”, explicó.
El cáncer de mama será el primero que podrá ser diagnosticado con la ayuda de esta nueva herramienta biotecnológica, ya que “es la que más avanzada se encuentra. En este sentido, ya hay una patente publicada en Estados Unidos, que está basada en la primera versión de la tecnología que desarrollamos desde Oncoliq”, señaló.
La idea de los científicos creadores del test argentino es poner a disposición “un análisis de sangre que permita detectar 50 tipos de cáncer y que esto sea parte de la rutina anual de análisis que se hace una persona para controlar su salud” (Getty Images)krisanapong detraphiphat | Getty Images
“Tenemos previsto lanzar al mercado el test de detección de cáncer de mama en marzo de 2025. En lo que respecta a los cuatro restantes, aún seguimos trabajando”, subrayó.
Cómo funciona el test
Esta nueva herramienta se basa en el análisis de microARN circulantes específicos del tipo de tumor que se identifican mediante tecnología patentada en equipos de PCR.
“Los microARN son moléculas que tenemos en todas las células de nuestro cuerpo y cumplen una función regulatoria. Cuando comienza a desarrollarse una enfermedad en algún órgano, se genera un cambio en las cantidades relativas de estos microARN, lo que se ve reflejado en la circulación”, explicó Simian a Infobae.
Los científicos que están desarrollando el nuevo test cuentan con “un método para determinar para cada tipo de cáncer cuáles son los microARN que están diferencialmente expresados entre la población sana y la población enferma. A partir de ahí, los medimos mediante la técnica de PCR en tiempo real”.
En esta etapa de desarrollo, dijo, “validamos cuáles son los microARN que nos permiten detectar cada tipo de cáncer. En otras palabras, para cada tipo de cáncer desde Oncoliq identificamos un set de microARN que detecta específicamente ese tipo de cáncer”. Por otra parte, agregó, “una de las principales características de nuestra tecnología es el desarrollo de algoritmos por Machine Learning”.
Parte de su practicidad radica en que, además de que sólo es necesaria una muestra de sangre, utiliza máquinas de PCR que se encuentran en todo el mundo a partir de la pandemia, ya que fueron utilizadas para la detección del COVID-19
Cómo se aplicará el nuevo screening
La idea de los científicos creadores del test argentino es poner a disposición “un análisis de sangre que permita detectar 50 tipos de cáncer y que esto sea parte de la rutina anual de análisis que se hace una persona para controlar su salud”.
“Con esa muestra de sangre, —agregó— se realiza una PCR para medir los microARN biomarcadores para cada tipo de cáncer. Los datos se ingresan en los algoritmos de Machine Learning, permitiéndonos determinar si los valores obtenidos corresponden o no a la presencia de un tumor en un órgano determinado”.
En caso de que el test de Oncoliq dé positivo, dijo, “se le recomendará al paciente continuar con mayores estudios para poder visualizar la presencia de un tumor y seguir rápidamente con las indicaciones del profesional médico con el objetivo de resolver su situación”.
“Es importante aclarar que Oncoliq no es una herramienta de diagnóstico, sino una de tamizaje (también conocido como screening)”, remarcó Simian. En el futuro podría convertirse en una forma útil tanto para los pacientes como para “gobiernos interesados en hacer controles de su población. En el caso de Argentina por ejemplo, hay ciertas provincias que impulsan programas en los que realizan tamizaje de cáncer de mama para su población. Lo mismo sucede en países europeos”.
La experta precisó que, si bien la meta es hallar de manera temprana 50 tumores diferentes, actualmente los investigadores están concentrados en desarrollar “la tecnología para detectar cáncer de mama, próstata, vejiga, endometrio y riñón (Hospital reina Sofía de Córdoba)JUNTA DE ANDALUCÍA | JUNTA DE ANDALUCÍA
Parte de su practicidad radica en que, además de que sólo es necesaria una muestra de sangre, utiliza máquinas de PCR que se encuentran en todo el mundo a partir de la pandemia, ya que fueron utilizadas para la detección del COVID-19.
“Oncoliq precisamente lo que permitiría es que muchas personas que viven cerca de estos centros, donde hay máquinas de PCR pero tal vez lejos de centros de imágenes, pueden hacerse un primer tamizaje con la tecnología de biopsia líquida como la nuestra; y a partir de este primer resultado, acceder a las imágenes”, manifestó.
Oncoliq fue creada por Simian y Adriana De Siervi, también doctora en Biología e investigadora del CONICET. La startup fue la primera en la que invirtió SF500, el fondo de inversión de 300 millones de dólares creado en Rosario, que busca transformar proyectos en startups de base científica que impacten en la salud de las personas y garanticen una buena calidad de vida.