El reconocido cineasta estadounidense Robert Benton, ganador de tres premios Oscar y figura destacada del cine contemporáneo, falleció este domingo a los 92 años en Manhattan. La noticia fue confirmada por su representante al diario The New York Times.
Benton dejó una huella imborrable en la historia del cine, especialmente por su labor como director y guionista. Su obra más aclamada fue Kramer contra Kramer (1979), por la que recibió dos premios de la Academia: mejor director y mejor guion adaptado.
La película, protagonizada por Dustin Hoffman y Meryl Streep —quienes también ganaron el Oscar por sus interpretaciones—, marcó un hito en el cine de drama familiar.
Otro de sus trabajos más destacados fue En un lugar del corazón (1984), que le valió un tercer Oscar, esta vez al mejor guion original. Entre sus otras películas como director figuran Ni un pelo de tonto (1994), con Paul Newman, y The Human Stain (2003), protagonizada por Anthony Hopkins y Nicole Kidman.
Antes de iniciar su carrera en el cine, Benton trabajó como director artístico en la revista Esquire. Su transición a la gran pantalla fue rápida y notable, coescribiendo junto a David Newman el guion de Bonnie y Clyde (1967), uno de los títulos fundacionales del Nuevo Hollywood.
También colaboró en los guiones de Superman (1978), El día de los tramposos (1970) y la comedia ¿Qué me pasa, doctor? (1972), dirigida por Peter Bogdanovich.
A lo largo de su carrera, Benton trabajó con algunas de las figuras más influyentes del cine, como Gene Hackman, Susan Sarandon y Nicole Kidman, y fue ampliamente reconocido por su estilo narrativo sensible y centrado en los conflictos humanos.
Además de sus premios de la Academia, fue homenajeado por el Sindicato de Guionistas de Estados Unidos por su trayectoria, y participó en diversos documentales sobre la historia del cine, como Magnates y estrellas: Una historia de Hollywood (2010), donde ofreció su visión sobre la evolución de la industria y su experiencia dentro del movimiento del Nuevo Hollywood.
Su legado permanece vivo a través de películas que no solo marcaron una época, sino que también redefinieron la forma de contar historias en el cine.
