El olvido es una experiencia común a medida que envejecemos. Todos experimentamos momentos en los que no podemos recordar ciertos detalles o información. Sin embargo, existe una diferencia entre el olvido normal relacionado con el envejecimiento y el olvido que puede ser un signo temprano de la enfermedad de Alzheimer.

1. Recuperación de los recuerdos

En el caso del olvido normal relacionado con el envejecimiento, puede ser difícil recuperar recuerdos almacenados a largo plazo. Esto puede manifestarse en dificultades para acceder a cierta información, como olvidar nombres. Sin embargo, estos problemas pueden ser mitigados con la ayuda de pistas o contexto.

En el caso de la enfermedad de Alzheimer, existe un problema temprano y profundo con la memoria reciente, e incluso las pistas y el contexto no parecen ayudar. Por ejemplo, si se le pide que recuerde tres palabras, una de las cuales es «manzana», y luego se le pregunta después de tres minutos cuáles eran las tres palabras, es posible que no recuerde «manzana», incluso si se le dice: «Una de ellas era una fruta». En el envejecimiento normal, es probable que recuerde la palabra una vez que se le da una pista.

2. Atención y concentración

En el olvido normal relacionado con el envejecimiento, puede haber una disminución en la atención y la concentración, pero el vocabulario y la comprensión de las relaciones entre las cosas generalmente no cambian con la edad.

En el caso de la enfermedad de Alzheimer, puede haber un deterioro en la atención y la concentración, pero también puede haber cambios en el vocabulario y la comprensión de las relaciones entre las cosas.

3. Memoria reciente

En la enfermedad de Alzheimer, existe un problema temprano y profundo con la memoria reciente, e incluso las pistas y el contexto no parecen ayudar. En el envejecimiento normal, es probable que recuerde la palabra una vez que se le da una pista.

4. Memoria cronológica y memoria de origen

Si tienes la enfermedad de Alzheimer, puedes tener dificultades para recordar el orden de las cosas (memoria cronológica) o quién dijo qué (memoria de origen). Puedes tener dificultades para encontrar palabras comunes (como reloj o bolígrafo), e incluso puedes no recordar que se hayan llevado a cabo conversaciones o eventos.

5. Repetición e intrusiones

Otros signos preocupantes incluyen la repetición (y no solo la insistencia) y el hecho de no darse cuenta de que tienes un problema de memoria (falta de juicio). Pueden haber intrusiones en tu memoria en la enfermedad de Alzheimer. Por ejemplo, si se te pide que dibujes un cubo, dentro de unos minutos, podrías pensar que se te pidió que recordaras la palabra «cubo».

Resumen de las diferencias entre el olvido normal y la enfermedad de Alzheimer

Olvido normal:

• La memoria mejora con pistas y contexto.
• El vocabulario y la comprensión de las relaciones permanecen intactos.
• Capacidad para recordar el orden de las cosas y quién dijo qué.
• Conciencia de la existencia de un problema de memoria (trastorno cognitivo subjetivo).
• El funcionamiento general sigue siendo bueno a pesar del olvido.
• Tomar decisiones no muy buenas de vez en cuando.
• Olvidar hacer un pago mensual.
• Incertidumbre sobre el día pero capaz de recordarlo más tarde.
• Dificultad con tareas más recientes o menos familiares, como configurar un nuevo dispositivo.
• Dificultad para encontrar un nuevo lugar mientras se conduce.

Enfermedad de Alzheimer:

• Memoria reciente deficiente, y las pistas y el contexto no ayudan.
• No puede recordar el orden de las cosas y quién dijo qué.
• La repetición se vuelve evidente; ocurren intrusiones en la memoria.
• No se da cuenta de que hay un problema de memoria.
• El funcionamiento diario disminuye con la memoria.
• Frecuente demostración de mal juicio y toma de decisiones.
• Incapacidad para pagar facturas regularmente.
• A menudo desorientado en el tiempo y el espacio.
• Dificultad con tareas familiares, como hacer café todos los días.
• Perderse al regresar a casa después del trabajo diario.

Cuándo consultar a un profesional de la salud

Cuando los problemas de memoria se asemejan más a los enumerados anteriormente para la enfermedad de Alzheimer, es hora de hablar con un profesional de la salud. Del mismo modo, cuando los problemas implican comportamientos peligrosos (como vagar afuera o dejar la estufa encendida), cambios significativos en el estado de ánimo y pérdida de habilidades como vestirse y cuidado personal, es hora de buscar ayuda profesional. Incluso si los problemas de memoria son menores, buscar la opinión tranquilizadora de un profesional de la salud puede ser lo mejor.

Un mensaje de conclusión

Puede ser angustiante considerar la enfermedad de Alzheimer o la demencia como la causa de tus problemas de memoria, por lo que es reconfortante entender que los problemas de memoria menores pueden ser simplemente un cambio normal relacionado con la edad. Si aún tienes dudas sobre tus cambios cognitivos, pregunta a alguien cercano qué observa y programa una cita con tu profesional de la salud.

No olvides cuidar tu bienestar mental y tu salud en general participando en actividades que estimulen tu cerebro, manteniendo relaciones sociales saludables y adoptando un estilo de vida equilibrado.

Lidia Baldomero

Lidia, una escritora apasionada del mundo del estilo de vida, nació en una pequeña ciudad costera de España. Desde muy temprana edad, su curiosidad y amor por la escritura la llevaron a explorar diferentes temas y expresarse a través de las palabras.

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