Un innovador estudio realizado por investigadores del University College Dublin y la Universidad Nacional de Irlanda, Maynooth, revela que la enfermedad de Alzheimer y otras demencias relacionadas pueden detectarse hasta cuatro años antes de un diagnóstico clínico al observar cómo las personas gestionan sus finanzas.
Este hallazgo podría revolucionar la forma en que se aborda la detección temprana y el apoyo a las personas afectadas por estas condiciones.
El estudio, liderado por el profesor Cal Muckley del UCD College of Business y el profesor asistente Shivam Agarwal de la Universidad de Maynooth, utilizó modelos de inteligencia artificial para analizar el comportamiento bancario de individuos con y sin afecciones de Alzheimer y demencia.
Los resultados revelaron que el 71% de las personas con la enfermedad y demencias relacionadas mostraron signos de dificultades en la gestión del dinero hasta cuatro años antes de un diagnóstico clínico.
Una estadística aún más impactante surge al considerar a las personas que viven solas: el 92% de ellos exhibieron problemas financieros que podrían estar vinculados a la demencia en etapas tempranas. Estos datos son cruciales, ya que sugieren que el monitoreo de la actividad financiera puede proporcionar pistas valiosas sobre la salud cognitiva de una persona.
La demencia, un síndrome causado por varias enfermedades, incluido el Alzheimer, afecta a un número significativo de personas en todo el mundo. En Irlanda, más de 64.000 personas viven con demencia, y se espera que esta cifra se duplique para el año 2050. Sin embargo, las primeras etapas de la demencia a menudo pasan desapercibidas, lo que deja a las personas vulnerables a errores financieros y abusos.
Gestión de dinero y demencia
Este estudio es el primero en resaltar la importancia de las dificultades en la gestión del dinero como indicador clave para predecir la demencia. Mientras que los signos tradicionales de la enfermedad, como la pérdida de memoria y la confusión, pueden ser difíciles de detectar en las primeras etapas, los problemas financieros pueden ofrecer una ventana única hacia la salud cognitiva de una persona.
Los hallazgos también tienen implicaciones importantes para las instituciones financieras, que pueden desempeñar un papel crucial en la protección de las personas mayores vulnerables. Dado que los bancos tienen la responsabilidad de proteger a sus clientes, la capacidad de identificar posibles signos de demencia temprana basados en el comportamiento financiero podría ser una herramienta invaluable.
Por ejemplo, si un cliente mayor muestra signos de dificultades en la gestión del dinero, el banco podría tomar medidas proactivas para protegerlo, como establecer límites en las transacciones o notificar a un familiar de confianza sobre las preocupaciones observadas. Esto no solo protege al cliente de posibles abusos financieros, sino que también proporciona una red de apoyo crucial durante un momento difícil.
Además, los resultados del estudio subrayan la importancia de la conciencia pública sobre los primeros signos de demencia y la importancia de abordar estos problemas de manera proactiva. La detección temprana no solo puede mejorar la calidad de vida de las personas afectadas, sino que también puede ayudar a reducir el impacto financiero y emocional en ellos y sus familias.
A medida que la población mundial envejece, la demencia se está convirtiendo en un desafío de salud pública cada vez mayor. Sin embargo, este estudio ofrece una nueva perspectiva esperanzadora al demostrar que la detección temprana es posible, incluso antes de que los síntomas tradicionales sean evidentes.
Sigue leyendo:
