Diego José Ibarra, hermano del hispano acusado por el asesinato de la estudiante de enfermería Laken Riley, hallada muerta a finales de febrero en el campus de la Universidad de Georgia, fue vinculado con la banda criminal venezolana Tren de Aragua.
De acuerdo con documentos de la Fiscalía de Georgia obtenidos por CNN, Ibarra posee varios tatuajes que están relacionados con los miembros de la organización criminal, cuya presencia se ha extendido durante los últimos años en Latinoamérica y más recientemente en algunas ciudades de Estados Unidos como Chicago, Texas y Nueva York.
Fotografías del cuerpo de Diego Ibarra, tomadas después de su detención el 23 de febrero de 2024, revelan que “tiene tatuada una corona de cinco puntas en el lado izquierdo del cuello y estrellas de cinco puntas en el lado derecho”, de acuerdo con la acusación de la Fiscalía.
Estos tatuajes serían propios de los integrantes del grupo de crimen organizado que nació en la cárcel de Tocorón en Venezuela, y que fue desalojado por las autoridades venezolanas en septiembre pasado, según los documentos citados por CNN.
Otro rasgo distintivo de los integrantes del Tren de Aragua es un gesto con las manos en el que extienden los dedos meñique, índice y pulgar, y doblando los dedos anular y corazón.
Investigadores del Departamento de Seguridad Nacional identificaron varias cuentas diferentes de redes sociales utilizadas por Ibarra en las que se puede apreciar que hace estas señales.
Este jueves, la Fiscalía de Georgia buscará probar ese vínculo de Ibarra con la banda delictiva venezolana durante la audiencia de presentación del detenido.
Diego Ibarra llamó la atención de las autoridades porque coincidía con la descripción de su hermano, sospechoso de la muerte de Laken Riley. Cuando fue cuestionado por un agente del Departamento de Policía del condado de Athens-Clarke (ACCPD), el venezolano de 29 años presentó al oficial el documento falso.
Ibarra había estado bajo custodia de las autoridades de inmigración, pero fue liberado el 30 de abril de 2023 porque “afirmó tener un temor creíble de regresar a Venezuela”.
Desde ese entonces, el venezolano había sido arrestado tres veces. Según los documentos, Ibarra presentó resistencia a la autoridad al momento de ser detenido por los agentes fronterizos e incluso intentó morder a un oficial que trató de someterlo.
También tenía antecedentes por conducir en estado de ebriedad en la localidad de Athens, en Georgia. Además, una mujer llamó al servicio de emergencias y lo denunció por presunta violencia doméstica y en un par de ocasiones fue detenido por presunto hurto de mercancía, aunque no se presentaron cargos en su contra.
Homicidio de Laken Riley
Diego Ibarra es el hermano de José Antonio Ibarra, un migrante indocumentado de 26 años nativo de Venezuela que enfrenta cargos estatales por homicidio con mala intención, homicidio grave, agresión agravada, encarcelamiento ilegal, secuestro, obstaculización de una llamada al 911 y ocultar de la muerte de otra persona en el homicidio de Riley.
La joven fue encontrada inconsciente y herida en una zona boscosa de la universidad el pasado 22 de febrero. La policía dictaminó que su muerte fue un homicidio y murió aparentemente por un traumatismo contundente.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) confirmó a Fox News hace unas semanas que José Antonio Ibarra ingresó ilegalmente a Estados Unidos en 2022 y había sido arrestado previamente en la ciudad de Nueva York.
El ICE dijo que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) lo había encontrado el 8 de septiembre de 2022, después de ingresar cerca de El Paso y fue “puesto en libertad condicional y liberado para su posterior procesamiento”.
La agencia también confirmó que Ibarra había sido arrestado por el Departamento de Policía de Nueva York un año después, el 14 de septiembre de 2023, y “acusado de actuar de manera que lesionara a un niño menor de 17 años y de una infracción de licencia de vehículo motorizado”.
Tren de Aragua en EE.UU.
Tren de Aragua comenzó su expansión internacional con una guerra territorial a través de la frontera con Colombia en 2018. Amplió sus fuentes de ingresos a través de un portafolio de al menos 20 delitos, que incluyen extorsión, secuestro, robo, estafa, minería ilegal del oro y contrabando de chatarra, así como homicidios y sicariatos, narcotráfico y lavado de dinero, trata de personas, tráfico de migrantes y la venta de armas a otros grupos criminales de la región.
En los últimos meses, la banda habría aprovechado una explosión de la migración venezolana para cruzar la frontera sur, de acuerdo con fuentes citadas por el New York Post.
La presencia del Tren de Aragua en suelo estadounidense se descubrió hace poco, luego de que autoridades confirmaron su presencia en ciudades de Texas, Illinois (Chicago) y Florida (Miami). También se suma Nueva York, donde las autoridades incluso estaban revisando a migrantes de los refugios en busca de tatuajes que puedan vincularlos con la sanguinaria organización.
Por otra parte, John Morales, agente especial del FBI a cargo de la división de El Paso en Texas, dijo al medio neoyorquino que la agencia está monitoreando de cerca el crecimiento del Tren de Aragua y le preocupa que forme alianzas con las redes existentes.
El Tren de Aragua, la MS-13 y otras pandillas podrían convertirse en aliados temporales, de acuerdo con el agente.
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