La Casa Blanca fijó el 27 de noviembre como fecha final para que Ucrania dé una respuesta a su plan de paz. La agenda es apretada para discutir un plan que muchos en el país describen como una capitulación ante Rusia. A pesar de … la enorme presión de Washington, el país invadido ha optado por una actitud constructiva manteniendo los contactos con la parte estadounidense.
La meta de esta delegación que se encuentra en Suiza es acercar posturas, defender el interés nacional y ser partícipe de los términos finales de un eventual acuerdo de paz. La reunión tendrá lugar este domingo en Ginebra, según fuentes de la agencia Reuters, y en ella participarán las delegaciones ucraniana, estadounidense, francesa, británica y alemana, según precisa AFP.
La delegación estadounidense está compuesta por el secretario de Estado, Marco Rubio, y el enviado especial de Trump, Steve Witkoff. Por su parte, el equipo ucraniano está liderado por Andrii Yermak, el jefe de la Oficina del Presidente. Un actor controvertido en Ucrania que Zelenski decidió mantener en su puesto tras una petición de renuncia lanzada por varios parlamentarios esta misma semana.
Junto a Yermak, estará también presente Rustem Umerov, secretario del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa, y Kirilo Budanov, director de la inteligencia militar. A la reunión en Suiza, que según Umerov, se celebrará «en los próximos días», también asistirán el primer Viceministro de Asuntos Exteriores, Serhiy Kyslytsia, el jefe Adjunto del Consejo de Seguridad y Defensa, Oleksandr Poklad y el número uno del Estado Mayor, Andriy Hnatov, entre otros.
El presidente ucraniano firmó el decreto correspondiente este sábado con el objetivo de que esta delegación sea la encargada de las negociaciones de paz con Estados Unidos, los países europeos y también con Rusia.
La Administración estadounidense ha intentado en varias ocasiones promover negociaciones de paz -incluyendo una reunión entre Trump y Putin en Alaska- sin grandes resultados. Desde Ucrania sienten que la mayor presión de Estados Unidos se ha dirigido hacia el agredido y consideran que los términos presentados en el plan de 28 puntos no hay cesiones por parte de Rusia.
El líder norteamericano sólo se decantó por aumentar las sanciones al Kremlin con restricciones a las mayores empresas petroleras a finales de octubre. Después de un mes de contactos secretos entre la representante de Estados Unidos y Rusia, al despacho de Zelenski en Kiev llegó un plan que demanda entregar a Moscú el control de toda la región de Donetsk, un área extremadamente fortificada que pasaría a manos rusas. Otra de las cuestiones controvertidas es la que tiene que ver con la reducción de las Fuerzas Armadas de Ucrania.
La última fórmula presentada por la Casa Blanca tampoco convence a los países europeos que prometieron, nuevamente, su apoyo a Ucrania. Este sábado varios líderes de Europa mantendrán una reunión en Sudáfrica al margen de la cumbre del G20. Los socios continentales de Kiev planean acordar una respuesta conjunta a la propuesta de Washington.
Aunque el foco está en Ucrania, la falta de definición en muchas cuestiones sustanciales del plan, podrían ser complicadas de abordar para la parte agresora. «Habiendo recibido, a grandes rasgos, gran parte de lo que quería, Moscú ahora tiene que tomar en serio algo que probablemente considerará fundamentalmente infundado y poco fiable», manifestó la especialista en política rusa, Tatiana Stanovaya, en sus redes sociales.