El expresidente de Estados Unidos y candidato republicano a la Presidencia, Donald Trump, se ha declarado este jueves no culpable de tratar de revertir los resultados de los comicios celebrados en noviembre de 2020. La vista judicial se ha celebrado después de que la Fiscalía adaptara la acusación en su contra para sortear los límites impuestos por el Tribunal Supremo en materia de inmunidad.
Así lo ha afirmado su equipo legal, que ha trasladado a la jueza Tanya Chutkan que Trump insiste en su inocencia respecto al asalto al Capitolio que tuvo lugar en enero de 2021. En ese momento, una turba de seguidores del magnate neoyorquino asaltó el Congreso estadounidense para impedir la ratificación de los resultados electorales que daban la victoria al actual inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden.
Tras las palabras del abogado de Trump, John Lauro, la jueza ha dado por finalizada la comparecencia de la defensa, pero ha puesto fin a la audiencia judicial sin fijar por el momento una fecha para el juicio contra el expresidente. “No tengo intención de concretar un calendario en la vista”, ha puntualizado antes de matizar que tiene previsto hacerlo lo antes posible, según informaciones recogidas por la cadena de televisión CNN.
Se trata de la primera vista judicial contra Trump en relación con el asalto al Capitolio desde que el Supremo avaló su inmunidad, una cuestión que podría volver a paralizar los procedimientos contra Trump, tal y como ha adelantado la propia jueza. “La cuestión de la inmunidad volverá a detener estos procedimientos”, ha dicho antes de aclarar que sería “inútil” fijar una fecha para el juicio.
Sin embargo, el fiscal Jack Smith ha rehecho esta semana su acusación manteniendo los cuatro cargos: conspiración para defraudar a Estados Unidos, conspiración para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción de un procedimiento oficial y conspiración contra los derechos de los ciudadanos.
Este cambio llega después de que el Supremo dictaminara a principios de julio que Trump gozaba de inmunidad como presidente del país, si bien descartó que esta fuese total, lo que deja la puerta abierta a que los tribunales estudien en detalle cuáles de los supuestos delitos atribuidos al antiguo mandatario fueron cometidos bajo el paraguas de un cargo presidencial y cuáles no.