El FBI investiga lo que considera un nuevo” intento de asesinato” contra el expresidente de EE UU Donald Trump, el segundo en dos meses.
El incidente se ha producido en el club de golf propiedad de Donald Trump en West Palm Beach, en Florida, cuando agentes del Servicio Secreto detectaron el cañón de un rifle AK-47 oculto entre los arbustos de la verja.
Uno de los agentes abrió fuego y un hombre se dio a la fuga. EL candidato se encuentra a salvo. Un sospechoso ha quedado detenido. La Policía ha localizado junto a la verja el arma de fuego y dos mochilas.
El incidente introduce nuevo factor en la accidentada campaña electoral estadounidense, a apenas cincuenta días para unos comicios presidenciales que prometen unos resultados muy ajustados entre Trump y su rival demócrata, Kamala Harris.
Las encuestas arrojan un empate técnico entre ambos. El propio Trump ha confirmado que se encuentra “sano y salvo” en un mensaje de texto enviado a sus simpatizantes. “De Trump: ¡ESTOY SANO Y SALVO! Nadie ha resultado herido. Gracias a Dios.
Agradezco tener vuestro apoyo”, indica el mensaje. “Hay gente en este mundo que hará lo que haga falta para detenernos”, agrega, “yo no dejaré de luchar por ustedes. ¡No me rendiré nunca! Siempre les querré por apoyarme. ¡Mediante nuestra UNIDAD Haremos a Estados Unidos Grande De Nuevo!”
En un comunicado, su campaña había alertado del incidente y se había limitado a comunicar que el candidato republicano se encuentra “a salvo”. “El presidente Trump se encuentra a salvo después de disparos en sus cercanías”, ha indicado el portavoz del candidato, Steven Cheung. “No hay más detalles por el momento”.
El sheriff Rick Bradshaw ha explicado en una rueda de prensa que la primera llamada de alerta se recibió en torno a las 13.30 horas locales (19.30 hora peninsular española), con el aviso de que se había producido un tiroteo. El área quedó inmediatamente acordonada.
“Afortunadamente, un testigo presencial vio a una persona darse a la fuga en un Nissan negro. Tomó una fotografía del vehículo en la que se veía la matrícula. Eso fue de gran ayuda”, ha explicado el sheriff Ric Bradshaw, en una rueda de prensa conjunta con responsables del FBI.
Eso permitió a los agentes localizar con rapidez el vehículo sospechoso, interceptarlo y detener a su ocupante. Posteriormente, en los arbustos, se encontró el rifle, al que se había instalado una mirilla, una cámara Go-Pro y dos mochilas.
La mirilla, ha precisado el FBI, hubiera permitido al atacante disparar con facilidad contra Trump, que se encontraba a un centenar de metros de distancia.
Again folks!
SHOTS FIRED at Trump Golf Course in West Palm Beach, Florida.
An AK-47 was discovered in the bushes, per local law enforcement. The Trump campaign has released a statement confirming former President Trump is safe.
A suspect has reportedly been apprehended. pic.twitter.com/FwRfrO3v6y
— Donald Trump Jr. (@DonaldJTrumpJr) September 15, 2024
Cuando se produjo el incidente, Trump estaba jugando al golf y se desplazaba entre dos hoyos. Uno de los agentes parte de su escolta del Servicio Secreto, que se había adelantado hacia el segundo hoyo como parte de las medidas de protección hacia el expresidente, vio sobresalir el cañón del rifle entre los arbustos que rodean el campo y abrió fuego. Eso hizo que el sospechoso se diera a la fuga.
La policía conoce la identidad del detenido, un varón, aunque no ha querido divulgarla hasta el momento.
Entre los detalles que ha dado a conocer ha precisado que, cuando fue arrestado, el sospechoso estaba desarmado y se ha mostrado tranquilo. Los disparos se originaron en el exterior de la valla que cierra el campo de golf, según han explicado dos fuentes a la agencia Reuters.
Imágenes emitidas por televisión muestran la zona acordonada y un vehículo detenido. El tráfico en la carretera ha quedado cortado.