Josh Hart confirmó que está lesionado al mostrar su dedo lastimado y explicar que sufre de daño nervioso en su mano de tiro. El jugador también habló sobre su dolor de espalda y reveló, de manera críptica, que regresó antes de lo esperado de los espasmos sufridos en pretemporada. A pesar de las molestias, Hart mantiene su intensidad característica en la cancha, corriendo como un torbellino de línea a línea sin mucha estructura o predictibilidad. Sin embargo, algunos días resultan particularmente desalentadores, como ocurrió en Halloween en Chicago, donde el atleta estuvo tan afectado que se sentó solo en la banca —a varios pies del huddle del tiempo fuera— con el rostro enterrado en sus manos. En esa ocasión, su juego parecía claramente afectado y lucía deprimido y desesperanzado. La situación lo llevó a conversar con el entrenador Mike Brown, quien se enfrenta por primera vez a la experiencia de dirigir a Josh Hart en estas circunstancias. **REDACCIÓN FV MEDIOS**
