Las autoridades de Taiwán ha elevado este jueves a más de mil la cifra provisional de heridos por el terremoto del miércoles, el más potente registrado en la isla en los últimos 25 años, si bien no se descarta que el balance de víctimas aumente, ya que unas 140 personas seguirían atrapadas en distintas zonas.
El Gobierno mantiene en nueve el recuento de fallecidos por los temblores, todos ellos correspondientes al condado de Hualien, epicentro del seísmo de magnitud 7,2 que también se dejó sentir en otros países de la zona, incluso provocando avisos de tsunami.
Los servicios de emergencia prosiguen con las actividades de rescate y han logrado poner a salvo a un grupo de seis mineros, aunque sólo en otro yacimiento habría más de 60 personas atrapos. La lista de personas bloqueos se completa con víctimas en zonas de montaña o en vehículos dentro de túneles, entre otros estragos.
Cientos de hogares seguían este jueves con problemas en el suministro eléctrico, mientras que el transporte comienza a recuperar poco a poco parte de la normalidad perdida, gracias en gran medida a la reanudación del tráfico ferroviario, informa la agencia taiwanesa CNA.
El seísmo se dejó notar, además, en la actividad industrial, con plantas paralizadas por precaución. Taiwan Semiconductor Manufacturing (TSMC), uno de los mayores fabricantes mundiales de microchips y proveedor de Apple y Nvidia, ha reactivado el 70 por ciento de sus equipos tras una parada total.