En la comunidad La Pelanza, ubicada en el municipio El Factor, provincia Sánchez Ramírez, se realizó el sepelio del joven comerciante Melanio López Núñez y su hijo de un año. La ceremonia tuvo lugar tras un suceso que dejó consternados a familiares y vecinos de la zona.

Según la información difundida, la noticia tomó por sorpresa a los allegados cuando se conoció que López Núñez había ocasionado la pérdida de su hijo de dos años mediante compresión del cuello por suspensión, para posteriormente provocar su propia pérdida. La revelación generó impacto entre los presentes.

Surelis Canario, prima hermana de López Núñez, expresó: “Yo supe que esa mujer lo dejó porque él la maltrataba; yo misma me sorprendí porque yo no sabía que él era así. Yo no sabía que el primo era así porque era un muchacho tranquilo y siempre lo veía alegre”. La familiar también agregó: “Yo supe que ellos tenían problema, que él la maltrataba”.
Otro vecino, identificado como Carlos Vargas, comentó: “En mi opinión, yo diría que tenemos que buscar a Dios porque esto se está poniendo cada día peor y tenemos que tener en cuenta que nada dura para siempre”. Sus palabras reflejaron preocupación por la situación social que percibe en la comunidad.

En el municipio El Factor, algunas personas atribuyen lo ocurrido a la influencia de un espíritu maligno que habría motivado la acción de López Núñez. Sin embargo, otros creen que la falta de comunicación en el hogar fue determinante. El residente Dionny Medina declaró: “Debe haber un diálogo entre la familia, tiene que haber una comunicación, porque si hubieran tenido una comunicación la madre y el padre, eso no sucede, el diablo anda suelto”.
Otro ciudadano, Eladio Mateo, manifestó su opinión de manera enfática: “Ese es un loco porque él tenía que ma… él y dejar al niño; usted no puede saber si él sería del gobierno algún día, y lo ma,,, ese individuo”.
El velatorio de los restos de López Núñez y de su hijo se llevó a cabo en la Funeraria Municipal de El Factor, donde acudieron familiares, amigos y residentes para despedirse. Posteriormente, ambos fueron sepultados en el cementerio correspondiente a la misma demarcación, en una jornada marcada por el recogimiento y el silencio.
El caso sigue siendo comentado entre los habitantes de La Pelanza y comunidades cercanas, quienes aún intentan asimilar lo sucedido. La situación ha dejado un ambiente de reflexión sobre la importancia del diálogo y la convivencia familiar.


