Redacción.- El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, enfrenta crecientes críticas y llamados a renunciar debido a escándalos relacionados con ataques a presuntas embarcaciones de narcotraficantes y su uso de la aplicación Signal para discutir información militar sensible.
Hegseth, exoficial de la Guardia Nacional del Ejército y expresentador de Fox News, fue confirmado por el Senado el pasado enero por un margen estrecho.
El caso “Signalgate” resurgió tras la publicación de un informe independiente que concluye que su uso de Signal para hablar de ataques en Yemen “creó un riesgo para la seguridad operativa”.
Además, la campaña militar lanzada por Washington en el Caribe y el Pacífico contra el narcotráfico, incluyendo ataques que mataron a presuntos contrabandistas sobrevivientes de bombardeos, ha aumentado la oposición a Hegseth.
Algunos demócratas han pedido su renuncia, aunque su permanencia en el gabinete de Donald Trump parece segura por ahora. Analistas advierten que cualquier nuevo incidente podría hacer que la Casa Blanca pierda la paciencia.
El informe del Inspector General del Pentágono señala que Hegseth puso en peligro a las tropas al revelar en Signal planes de ataques aéreos y detalles de equipos militares, lo que podría haber comprometido la misión.
Hegseth también está en la mira por los ataques a presuntos narcotraficantes, especialmente en la operación de septiembre donde murieron dos supervivientes de una embarcación previamente destruida. Legisladores describieron la acción como un ataque a marinos náufragos, aunque algunos, como el republicano Tom Cotton, la defendieron como legítima y necesaria.
El secretario y la Casa Blanca aclararon que la segunda fase de los ataques fue ordenada por el comando operativo, no directamente por Hegseth.