FVDigital, Santo Domingo.- Las lecciones que trae la lluvia cada año en Santo Domingo Este reflejan que el alcalde gobierna sin realizar el mantenimiento ni la inversión necesaria, pero sale con equipo fotográfico, sombrillas y capas impermeables para mostrar lo que debería haber hecho antes bajo el sol.
Una de las principales funciones de los ayuntamientos es velar por un sistema pluvial funcional. Para ello cuentan con recursos que, aunque no sean suficientes, sí son importantes y que, utilizados mejor en el tiempo, podrían contribuir a una solución definitiva o al menos paliar la situación de inundaciones, caos en el tránsito y riesgo para las vidas humanas en que se convierte Santo Domingo Este.
Las autoridades solo recuerdan el mantenimiento del drenaje pluvial cuando el COE anuncia algún fenómeno atmosférico. Inmediatamente realizan un show mediático, aparentando resolver lo que debieron anticipar en los meses previos.
Nuestro país está en el Caribe, donde el embate de fuertes temporales de lluvia y ciclones está establecido cíclicamente en las temporadas ciclónicas. Es decir, conocemos los meses en que llegan y los puntos recurrentes y críticos, por lo que deberíamos estar anticipados y preparados.
El alcalde de Santo Domingo Este despliega muchos recursos económicos en campañas publicitarias sistemáticas en torno a su figura, pero bien haría en invertir parte de estos recursos en campañas de concientización ciudadana sobre la limpieza de imbornales y contenes, realizar un mapeo indicativo de los puntos críticos y aplicar mantenimiento preventivo de limpieza, correctivo de desvío de aguas y construcción de nuevos imbornales.
Este mantenimiento, sumado a una programación económica para la inversión en obras de alcantarillado y grandes soluciones de drenaje, representaría un verdadero cambio para el municipio.
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**REDACCIÓN FV MEDIOS**