La profesión médica en España siempre ha estado marcada por el
respeto social y una larga formación. Saber cuánto gana un médico
en 2025 resulta más importante que nunca, ya que las diferencias
entre el sector público y privado, así como entre regiones y
especialidades, influyen de forma directa en el día a día y en
las decisiones de muchos profesionales. El
reconocimiento social y los últimos incrementos salariales añaden
más interés al dato. No todos
los médicos perciben lo mismo. El salario depende de la
experiencia, del tipo de especialidad y de la comunidad
autónoma.

El trabajo en medicina exige años de estudio y dedicación. La
retribución intenta reflejar esta exigencia, aunque existen matices
que hacen cada caso diferente. El contexto nacional marca un antes
y un después con los últimos cambios salariales, que buscan no solo
atraer nuevo talento sino también retener a quienes llevan años en
la profesión.
Salario medio de un médico en España en 2025
En 2025, las cifras indican que el salario medio de un
médico en España oscila entre 31.000 y 56.000
euros brutos anuales, dependiendo de la experiencia,
especialidad y puesto de trabajo. Un médico recién titulado o en
formación suele comenzar con un salario base
cercano a los 24.000 euros anuales, mientras que
un especialista con experiencia puede superar los 55.000
euros cada año. Por su parte, aquellos con trayectorias
consolidadas o cargos de mayor responsabilidad alcanzan cifras aún
mayores.
La diferencia entre salarios en el sistema público y el privado
es real y palpable. El sector público ofrece un salario
medio cercano a los 54.200 euros, gracias a los últimos
incrementos salariales aprobados por el gobierno,
que han supuesto una subida general del 2% y, en algunos casos, un
0,5% adicional ligado a la inflación. Estos incrementos impactan de
forma directa en el salario base, aunque los
complementos y guardias suelen variar.
En el sector privado la realidad es otra. Aunque existe la
posibilidad de alcanzar sueldos elevados, estos dependen más del
volumen de trabajo, del prestigio del médico y de la cartera propia
de pacientes, además de que los especialistas
mejor valorados pueden negociar condiciones diferentes.

Diferencias regionales y por especialidad
La retribución de los médicos en España fluctúa mucho según la
comunidad autónoma. Trabajar en ciudades como
Madrid, Galicia o
Canarias puede suponer diferencias notables en el
sueldo anual. En Madrid, el salario suele encontrarse en la
horquilla alta, sobre todo cuando se suma la remuneración por
guardias y distintos
complementos.
Las diferencias por especialidad resultan igual
de contundentes. Un médico de medicina familiar en
el sistema público, tras varios años de experiencia y realizando
guardias, puede obtener cerca de 37.000 a 46.000 euros
brutos al año. Sin embargo, un especialista
hospitalario en áreas como Cardiología, Anestesiología o
Cirugía puede situarse con facilidad en los 55.000 euros
anuales o más, especialmente si incluye jornadas con mayor
exigencia o responsabilidad.
La remuneración se incrementa añadido a las
guardias, que en algunas regiones pueden
representar hasta 800 euros por 24 horas, y en
otras, valores inferiores. Los pluses por
responsabilidad, antigüedad y puestos de coordinación
completan el salario final de los facultativos, haciendo que la
suma total en ocasiones supere las cifras medias. En zonas rurales
o con déficits de especialistas, la remuneración sube para atraer a
profesionales, un método que algunas comunidades autónomas han
reforzado en los últimos años.
El salario de los médicos MIR
En 2025, los médicos internos residentes (MIR)
reciben un salario base que parte de los 1.382 euros brutos
mensuales y se sitúa cerca del nuevo salario
mínimo interprofesional. Esto equivale aproximadamente a
16.500 euros brutos al año en las comunidades que
siguen la tabla central, aunque en lugares concretos la cifra puede
variar.
A esta base se le suman las guardias y otros
complementos, que permiten incrementar el salario
hasta los 24.000 euros anuales o más cuando se
aprovechan todas las oportunidades disponibles. La diferencia entre
comunidades se nota especialmente en los pagos por guardias y
disponibilidad.
Médicos MIR en el primer año ganan menos que sus colegas
mayores, pero cada año de avance en la residencia supone un aumento
de salario.
Tras concluir la etapa de formación y ya como
especialista, el salario aumenta de forma
significativa. Pasar de MIR a facultativo implica un salto
económico pero también nuevas responsabilidades y, muchas veces, la
opción de acceder a nuevos complementos según el centro de
trabajo.



