SAN FRANCISCO — El estado de la estrella de New York Liberty, Sabrina Ionescu, para el partido del martes en su natal área de la Bahía sigue siendo incierto. La base, que ha perdido tres de los últimos cuatro encuentros por lesiones, realizó un entrenamiento individual el lunes por la tarde y está “progresando”, según la entrenadora Sandy Brondello.
“Ella conoce su cuerpo”, declaró Brondello. “No sabemos si [jugará] mañana o no… Ya veremos”.
Ionescu se considera “día a día” después de lesionarse el dedo gordo del pie izquierdo hacia el final del entrenamiento del miércoles. Esta lesión ocurrió menos de una semana después de que la pívot de Chicago Sky, Kamilla Cardoso, lastimara el mismo pie de Ionescu durante una colisión por un balón suelto.
Esta es la segunda vez que Ionescu llega a un juego de regreso a casa con estado cuestionable. La última vez que Liberty jugó en el Chase Center, la jugadora sufría de rigidez cervical, lo que le dificultaba mover la cabeza.
En 36 partidos esta temporada, Ionescu promedia 18.8 puntos, 5.8 asistencias y 4.9 rebotes.
Nyara Sabally, que no ha jugado desde antes del All-Star Break, también figura como cuestionable para el partido del martes. La ala-pívot ha comenzado el proceso de reactivación en los últimos días.
Dos días después de que Breanna Stewart criticara el juego de su equipo por “no ser lo suficientemente bueno”, Liberty se reagrupó en una cancha de gimnasio en San Francisco.
La práctica durante la temporada de la WNBA es un lujo que las limitaciones de programación no siempre permiten. Pero Liberty utilizó un raro día libre para entrar a un gimnasio y resolver algunos de los problemas del equipo, especialmente en defensa. Emma Meesseman consideró que la práctica del lunes fue exactamente “lo que necesitábamos”.
“Fue una buena práctica porque tuvimos la oportunidad de esforzarnos un poco más con contacto, hablar sobre muchas cosas”, afirmó. “Se sintió bien. Siento que estamos un poco más en la misma página y podemos trabajar en ello en baloncesto en vivo”.
La defensa general de Liberty se ubicó entre las tres mejores de la liga en 2023, pero esta temporada ha sido diferente. No ayuda que los jugadores hayan entrado y salido de la alineación debido a lesiones, lo que ha perjudicado la capacidad del equipo para desarrollar química colectiva.
Pero Meesseman cree que la defensa de Liberty está mejorando: “Cambiamos algunas cosas y nos tomamos el tiempo para definir esa identidad [defensiva] en los últimos dos días. Así que después de este entrenamiento, espero poder llevarlo a la cancha [el martes] para ver cómo nos adaptamos y qué tan bien podemos ejecutarlo. Tengo la esperanza y la confianza de que lo que hicimos hoy nos ayudará en el futuro”.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**