Este lunes por la noche, el Metro de Santo Domingo vivió momentos de tensión cuando varias estaciones fueron cerradas tras un reporte preliminar sobre un incidente en la estación Gregorio Gilbert, situada en Villa Mella, municipio Santo Domingo Norte. Aunque los detalles iniciales eran escasos y no habían sido confirmados oficialmente, se informó de manera extraoficial sobre un sonido fuerte que provocó una respuesta inmediata de las autoridades y servicios de emergencia.
En respuesta a este incidente, el Sistema Nacional de Emergencias 9-1-1 desplegó sus unidades junto al Cuerpo de Bomberos de Santo Domingo Norte, quienes acudieron de inmediato al lugar para controlar la situación y asegurar la integridad de los pasajeros. Las primeras acciones estuvieron enfocadas en evacuar de manera ordenada a los usuarios presentes en la estación al momento del incidente y prevenir cualquier otro riesgo potencial.
La incertidumbre se extendió a medida que videos y fotos tomados por ciudadanos comenzaron a circular en redes sociales, mostrando vehículos de emergencia y personal policial alrededor del área. Estos testimonios visuales, aunque vívidos, no aportaron claridad definitiva sobre el tipo de incidente, limitándose a ilustrar la magnitud de la respuesta operativa desplegada por las autoridades.
Mientras las investigaciones continúan, la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (OPRET) subrayó la necesidad de esperar los resultados de las pesquisas antes de especular sobre las causas o consecuencias exactas del evento. La entidad señaló que en días recientes habían enfrentado algunos problemas eléctricos aislados en distintas estaciones de la Línea 1, aunque no se puede confirmar aún una relación directa con el reciente incidente. “Debemos actuar con precaución y esperar los informes técnicos oficiales antes de emitir conclusiones precipitadas”, indicó un portavoz de la OPRET.
El cierre temporal de las estaciones afectadas, según las autoridades, es una medida preventiva diseñada para minimizar cualquier amenaza residual para los pasajeros y el personal del metro. Mientras se resuelven las incógnitas del caso, las fuerzas de seguridad mantienen un estricto control de la zona con la finalidad de garantizar que no haya desbordes y que la calma predomine entre los habitantes de Santo Domingo Norte.
Por su parte, los ciudadanos expresan una mezcla de preocupación y frustración. Algunos han manifestado su inquietud sobre la seguridad del sistema de transporte tras estos sucesos, que aunque no son comunes, generan un grado de desconfianza en los usuarios regulares del metro.
Hasta el momento, no se ha emitido un comunicado oficial detallando la cantidad de personas potencialmente afectadas ni una lista de daños materiales, en caso de haberlos. Todas las entidades involucradas exhortan a la población a mantenerse informada a partir de fuentes oficiales, ya que la situación sigue bajo análisis. Mientras tanto, las operaciones normales del Metro de Santo Domingo se mantienen suspendidas en las zonas implicadas, a la espera de nuevas directrices.
Se anticipa que en las próximas horas la OPRET brinde un informe preliminar que esclarezca las circunstancias exactas y las posibles medidas de ajuste que se implementarán para reforzar la seguridad del sistema, asegurando así la tranquilidad de los usuarios y restableciendo un servicio eficiente y confiable para la comunidad.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**