La fosa de las Marianas, en el océano Pacífico, es el punto más profundo del planeta y uno de los lugares más misteriosos de la Tierra, con más de 11 kilómetros de profundidad.
Este inaccesible lugar está rodeado de interrogantes. Por ejemplo, hace una década se registraron por primera vez unos ruidos extraños que surgían de la fosa. Duraban entre 2,5 y 3,5 segundos y se denominaron Biotwangs.
Eran gemidos profundos a frecuencias extremadamente bajas, como 38 hercios, y tenían un final agudo que llegaba hasta unos impresionantes 8.000 hercios, pero su fuente permaneció desconocida durante años.
En 2016, los expertos creyeron que podría serla llamada de apareamiento de una ballena barbada, pero nadie estuvo seguro debido a la aleatoriedad de los ruidos.
Sharon Nieukirk, experta en bioacústica marina de la Universidad Estatal de Oregón, y autora de la investigación, dijo al The Sun: “Si se trata de un llamado de apareamiento, ¿por qué lo escuchamos todo el año? Eso es un misterio”.
Ahora, después de volver a analizar los sonidos, los expertos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) creen que finalmente tienen una respuesta.
Un nuevo estudio sugiere que en lugar de que el ruido sea producido por las ballenas barbadas, otra especie, las ballenas de Bryde, podrían ser las responsables de los extraños sonidos.
Este tipo de criaturas se pueden encontrar en océanos cálidos y templados de todo el mundo, como el Atlántico, el Índico y el Pacífico. Los investigadores vieron 10 ballenas nadando en la zona y registraron nueve de ellas haciendo ruidos significativos.
Pero para demostrar que las ballenas de Bryde eran la fuente de los extraños ruidos, los expertos utilizaron inteligencia artificial. En el estudio publicado en Frontiers in Marine Science , el equipo dijo: “Se asumió que fue producido por una ballena barbada, pero sin verificación visual fue imposible asignar una especie”.
“Utilizando una combinación de datos de estudios visuales y acústicos recopilados en el archipiélago de las Marianas, determinamos que los Biotwangs son producidos por las ballenas de Bryde“, dice el texto.
“Utilizamos una combinación de métodos de anotación manuales y de aprendizaje automático para detectar Biotwangs en nuestros extensos conjuntos de datos históricos de monitoreo acústico pasivo recopilados en el Pacífico Norte central y occidental”, prosigue.
“Identificamos una presencia estacional constante de Biotwangs en el archipiélago de las Marianas y al este en la isla Wake, con ocurrencia ocasional tan lejos como las islas del noroeste de Hawái y cerca del ecuador (isla Howland)”, añaden los autores.
Si bien aún no se ha confirmado por qué las ballenas hacen esto, se cree que las criaturas podrían estar usando el Biotwang como una llamada de contacto.