Bajo el asesoramiento del bufete de abogados King & Spalding, parece que la cadena de restaurantes de mariscos Red Lobster estaría considerando declararse en bancarrota según el Capítulo 11 mientras busca reestructurar su deuda, ha reportado Bloomberg.
Las personas que han compartido la información y que tienen conocimiento del asunto pidieron no ser identificadas al tratarse de un asunto privado. Red Lobster considera realizar una presentación del Capítulo 11 para poder deshacerse de algunos contratos a largo plazo y poder renegociar otros de arrendamiento.
Fortress Investment Group, prestamista clave de Red Lobster, se encuentra entre los involucrados en las negociaciones de deuda actuales de la cadena de restaurantes; de acuerdo a la información compartida. Y Bloomberg informó que un representante de Fortress declinó hacer comentarios al respecto.
Parece ser que los flujos de caja de la cadena de restaurantes de mariscos se han visto afectados por arrendamientos elevados y costos laborales, entre otras cuestiones. Aunque no se ha tomado una decisión final, las discusiones sobre la reestructuración están en curso.
Si Red Lobster se declarara en quiebra le permitiría a la empresa seguir con sus operaciones mientras trabaja en un plan para reducir su deuda. Al momento de escribir esta nota, no hay ningún comunicado oficial de Red Lobster o King & Spalding.
En los últimos años Red Lobster ha experimentado múltiples cambios de propietarios y administración. En 2014 Golden Gate Capital compró Red Lobster de manos de Darden Restaurants mediante una compra apalancada. En ese momento Thai Union Group Plc poseía el 25% de la cadena.
Thai Union Group Plc tomó control de la empresa en 2021 y este año redimió su participación en la cadena de restaurantes de mariscos y dijo que los “requisitos financieros actuales de la empresa ya no se alinean con las prioridades de asignación de capital de Thai Union”.
La historia de Red lobster tiene sus inicios en 1968 en un solo restaurante en Lakeland, Florida. La compañía introdujo al mercado sus populares ‘biscuits’ con sabor a queso en 1992 y ahora cuenta con más de 600 locaciones en Estados Unidos, Canadá, así como franquicias internacionales.
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