El sueño de Cadillac comienza en Imola. Este jueves y viernes, la escudería estadounidense estará en la pista del trazado italiano con un Ferrari SF-23 decorado totalmente en negro y pilotado por Sergio Pérez, como parte del programa TPC (Pruebas de Coches Previos).
El equipo dirigido por Graeme Lowdon necesita sentirse cómodo y familiarizarse con los procedimientos de los grandes premios antes de su debut en la F1 en 2026. Como afirma el director del equipo, “no estamos probando el coche, estamos probando a la gente”. En concreto, “la ventaja que queremos es que nuestros mecánicos tengan la misma experiencia que los que trabajan cada día en el pitlane de la F1”.
Con este fin, Cadillac ha obtenido cedido por Ferrari el monoplaza 2023. La Scuderia probó ese mismo SF-23 el martes en su propia pista de Fiorano con Arthur Leclerc para asegurarse de que entregaba un coche plenamente operativo.
El miércoles, unos 30 miembros de Ferrari ayudaron a unos 20 del equipo Cadillac a preparar los boxes 16 y 17 de Imola. Originalmente, los uniformes rojos iban a permanecer en el guardarropa; pero una vez que se difundió la noticia del test, el intento de permanecer de incógnito se frustró.Al volante, ambos días, estará Sergio Pérez. El mexicano empezó a trabajar con el equipo en verano, libre de obligaciones contractuales. Para él será el ilusionante regreso a la F1 tras un periodo difícil en Red Bull Racing y un año, este 2025, sabático.
Valtteri Bottas, en cambio, no estará en el test. El finlandés sigue ligado a Mercedes por su contrato como tercer piloto, por lo que tendrá que esperar hasta 2026 para integrarse en su nuevo equipo.Supervisando los test estará Peter Crolla, jefe de equipo de Cadillac desde el pasado mes de abril. El ingeniero británico ya ocupó dicho cargo en Haas F1 de 2022 a 2024.
Queremos tu opinión
¿Qué le gustaría ver en Motorsport.com?
– El equipo de Motorsport.com