Una banda de piratas de porche utilizó información privilegiada para rastrear entregas de FedEx y sustraer cientos de paquetes valiosos de residentes de Long Island durante casi dos años, según fiscales de Nueva York. Catorce personas han sido acusadas en el esquema, que apuntó a entregas de teléfonos celulares en Long Island desde octubre de 2023 hasta febrero de 2025, anunció la Oficina del Fiscal del Condado de Suffolk.
Los ladrones aprovecharon información interna sobre entregas —incluyendo números de rastreo, nombres de destinatarios, contenido de paquetes y horarios de entrega— para robar cajas de electrónicos costosos de los porches de numerosas viviendas minutos después de realizadas las entregas.
La mayoría de los paquetes fueron enviados a través de FedEx desde Verizon y AT&T, cuyos sistemas de entrega probablemente fueron infiltrados digitalmente por los presuntos ladrones, según fiscales. “Creemos que esa información fue hackeada”, declaró el fiscal del condado de Suffolk, Raymond Tierney.
Los criminales transportaban la mercancía robada a una serie de casas de almacenamiento en el Bronx, donde los artículos eran inventariados y vendidos a mayoristas en Estados Unidos y el extranjero.
“Durante dos años, esta presunta red de piratas de porche plagó nuestra comunidad y construyó una empresa criminal a costa de familias y negocios del condado de Suffolk”, afirmó Tierney.
Se cree que el esquema fue dirigido por Andricson Jerez, de 29 años, quien daba órdenes a sus cómplices usando sistemas de mensajería encriptada, según fiscales. Su padre, Juan Baez, de 48 años, también estuvo supuestamente involucrado en el esquema y ayudaba a entregar los teléfonos y electrónicos robados a compradores.
Más de 30 pueblos de Long Island fueron blanco durante el esquema, y las cosas se volvieron violentas en ocasiones. En un incidente, un conductor de entregas de FedEx fue empujado por Luger Guerrero, de 26 años, y una cuadrilla de ladrones que luego robaron un paquete con 15 tabletas. En otro encuentro, un paquete fue supuestamente arrancado de las manos de un propietario por Felipe Batista, de 22 años.
Los acusados enfrentan 50 cargos por robo, corrupción empresarial, conspiración y hurto relacionados con el esquema. Jerez, el presunto cabecilla, enfrenta hasta 25 años de prisión si es declarado culpable.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**