Los comisarios sancionaron el viernes a Oliver Bearman con 10 posiciones para la parrilla de salida, debido a que el piloto de Haas había adelantado al Williams de Carlos Sainz con bandera roja en la segunda sesión de entrenamientos libres.
Según las explicaciones de los comisarios, eso resultó ser una elección deliberada de Bearman, que consideró más peligroso frenar de repente que adelantar. Los comisarios no aceptaron esa explicación y el británico tendrá que retroceder 10 puestos [o los que pueda] en la parrilla de salida del GP de Mónaco.

Un día después, los comisarios también investigaron una supuesta violación de las mismas normas por parte del propio Sainz. Sin embargo, su incidente no notificó hasta el sábado, lo que obligó al piloto a declarar ante los comisarios después de la FP3.
El caso Sainz
Los comisarios señalaron que Sainz había adelantado al Alpine de Franco Colapinto en la curva 2, cuando ondearon las banderas rojas. Sin embargo, las imágenes mostraban al argentino a un ritmo lento y cediendo el paso al español. La gran diferencia de velocidad hizo que Sainz no pudiera frenar a tiempo para evitar el adelantamiento sobre el Alpine.
“Sainz estaba muy cerca de Colapinto, a 42 metros”, señalaron los comisarios. “Sainz circulaba a una velocidad considerable en ese momento, superior a 250 km/h. Colapinto, por su parte, estaba dando una vuelta lenta por el lado izquierdo de la pista. En cuanto se mostró la bandera roja, Sainz tomó inmediatamente medidas para frenar de forma segura, como exige el artículo 2.5.4.1(b) del Apéndice H del Código Deportivo Internacional. Había una diferencia de velocidad significativa entre los dos coches y el adelantamiento era una consecuencia inevitable por esa diferencia de velocidad y por la distancia entre los coches. Dadas las circunstancias, no tomamos ninguna otra medida”, concluía el comunicado.
El caso Colapinto
Al final, los tres pilotos mencionados quedaron vinculados entre sí, ya que posteriormente fue también Colapinto quien tuvo que dar explicaciones a los comisarios. El argentino adelantó al Aston Martin de Lance Stroll al final de la tercera sesión de entrenamientos libres -cuando Lewis Hamilton provocó la bandera roja- mientras ondeaba la bandera roja. Sin embargo, él también se libró de la sanción.
En el caso del piloto argentino de Alpine, las señales oficiales de la FIA jugaron un papel clave.
“Cuando se produjo el adelantamiento tras la bandera roja, el puesto del comisario, a la derecha del coche 43 [Colapinto], seguía mostrando una bandera azul y el panel de luces también mostraba una bandera azul, que posteriormente cambió a roja”, explicaron los comisarios. “Cuando finalmente se mostró la bandera roja en el panel, el coche 43 tomó medidas inmediatas para reducir la velocidad, tal como se exige en el Artículo 2.5.4.1 b). Esto también se reflejó claramente en la telemetría. En el momento en que el panel de luces se puso en rojo, la distancia entre ambos coches era de tan solo 30 metros y existía una significativa diferencia de velocidad entre ellos”, rezaba el comunicado.
Franco Colapinto, Alpine
Foto de: Glenn Dunbar / Motorsport Images
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