Aston Martin centró toda su atención en las regulaciones de 2026 a principios de este año, convirtiéndose en uno de los primeros equipos de Fórmula 1 en hacerlo. Según el director del equipo y CEO, Andy Cowell, ese enfoque llevó a una temporada 2025 “dolorosa”, aunque la esperanza es que el equipo recoja los frutos en los próximos años.
Adrian Newey desempeña un papel clave en esa visión a largo plazo y representa la apuesta clara del equipo para 2026. El legendario diseñador se instaló en marzo de este año en su oficina acristalada —con su icónica mesa de dibujo incluida—. Desde su llegada, Newey se ha dedicado por completo al coche de 2026. El británico ha ofrecido algunos consejos informales sobre el monoplaza de 2025 durante los almuerzos, pero por lo demás ha evitado cualquier distracción de su objetivo principal: triunfar bajo el nuevo reglamento.
Los ingenieros de Aston Martin, impresionados con Newey
Durante el Gran Premio de Mónaco —su primer fin de semana en el paddock desde que se unió a Aston Martin—, Newey comentó que su esposa lo ve entrar en un “trance de diseño” cada vez que desarrolla un coche nuevo. Según Cowell, eso es exactamente lo que está ocurriendo ahora mismo en Aston Martin.
“Sí, es una persona excepcionalmente concentrada, muy motivada, con una mente enfocada, y está haciendo diseños detallados en su mesa de dibujo en la oficina”, explicó Cowell en una entrevista exclusiva con Motorsport.com.
Cuando se le preguntó en tono de broma si Newey ya había empezado a dormir en la oficina, Cowell se rió: “¡Bueno, todos necesitamos camas en la fábrica!”.
“Entras para ponerte al día con él, y lo ves completamente concentrado en un detalle de diseño. Como nos pasa a muchos, cuando estás totalmente centrado en algo, parece que estás en trance. Su nivel de detalle es impresionante. ¡Casi te disculpas por distraerlo! ‘Perdona un momento; quería hablar contigo de otra cosa…'”, contó Cowell entre risas, describiendo un día típico en el campus del equipo en Silverstone.
Cowell admite que le impresiona ver a Newey trabajar en su nuevo equipo. “Es un placer observarlo, y su capacidad para analizar la arquitectura global de un coche, equilibrando todos los sistemas en conflicto, diría que es la mejor de la industria”.
Foto de: Zak Mauger / Motorsport Images via Getty Images
Esa impresión no es solo de Cowell, sino que se comparte ampliamente dentro de los departamentos de ingeniería de Aston Martin.
“Además, su enfoque de ingeniería basado en los principios fundamentales es muy agudo. Está muy concentrado en eso”, añadió Cowell. “Muchos ingenieros mecánicos estructurales con los que he hablado dicen que su ingeniería de primeros principios es impresionante. La rigidez de un componente, el BDQ… siempre nos lo recuerda. Así que sí, es un ingeniero excepcional”.
La división de roles entre Newey y Cardile
Newey no ha sido la única gran incorporación técnica de Aston Martin en el último año. El exingeniero de Ferrari, Enrico Cardile, también se unió al equipo con sede en Silverstone hace poco más de dos meses. Con dos líderes de alto perfil, podría haber fricción en torno a los roles y responsabilidades exactos, pero Cowell insiste en que todo está claramente definido.
“Adrian está muy centrado en el diseño detallado, desde principios de marzo, estudiando las regulaciones, entendiendo los conceptos creados y desarrollándolos. Está muy enfocado en la arquitectura central del coche, en los aspectos que probablemente no quieras cambiar durante una temporada. Ese ha sido su foco inicial”, explicó Cowell.
“Y está muy involucrado en el trabajo aerodinámico detallado, en el diseño mecánico, en la suspensión. Puedes verlo tanto en su mesa de dibujo como en las pantallas de CFD de los ingenieros”.
Cardile, por otro lado, tiene una tarea distinta: supervisar toda la operación más que el coche en sí. “Enrico se encarga de la organización, del crecimiento y desarrollo de las personas y de cómo encaja todo. Se centra en cómo funciona nuestra máquina de innovación, pero también en cómo optimizar el trabajo en equipo para que todos desempeñen su papel en el momento adecuado”, explicó Cowell.
“Pero tienen las oficinas una al lado de la otra. La mayoría de las veces almuerzan juntos, y creo que hay una relación muy buena entre ellos. Ambos entienden sus fortalezas, y me parece que todo pinta muy bien”.
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