Redacción. – Agentes de policía en la provincia de Henan en China, fueron captados cuidando al hijo de una repartidora de comida, quien les pidió ayuda mientras completaba sus entregas bajo una intensa lluvia.
La mujer, que no tenía con quién dejar al niño, confió en los oficiales para protegerlo. Los agentes vistieron al menor con ropa seca y limpia, y una oficial lo mantuvo en brazos hasta que su madre regresó, encontrándolo dormido y a salvo.


