El oftalmólogo Herbert Stern Díaz habló sobre algunas cábalas que rodean a la existencia de las pestañas
Las pestañas son una especie de guardianes peludos que crecen alrededor de los ojos. Éstas funcionan como un filtro que impide que el polvo, la tierra o arenilla entren al órgano visor.
De estos pequeños pelos protectores, todos saben que son parte del rostro, pero con poca frecuencia las personas se detienen a ver la importancia de las pestañas, a menos que sea para resaltar la estética del ojo.
Las pestañas empiezan a crecer a las 22 semanas, cuando todavía el ser humano es un embrión, aunque todos cuentan con este escudo desde el nacimiento no siempre las personas se detienen a ver su valor hasta que una patología los obliga a prestarle atención.
En esta entrevista al doctor Herbert Stern Díaz sobre la importancia de las pestañas, los mitos y verdades , los lectores sabrán que su función no sólo es estética.
El pasado presidente de la Sociedad Dominicana de Oftalmología aseguró que las pestañas son importantes por la protección que brindan a los ojos ante la presencia de cuerpos extraños.
Junto a esta afirmación desmintió algunas cábalas que rodean el origen y función de las pestañas. En este sentido, el oftalmólogo expresó que unos cuantos creen que al caerse las pestañas no es posible conciliar el sueño; ante esta creencia, el doctor dijo que eso no es cierto.
“La falta de pestañas puede llegar a molestar un poco porque son filtros parte del cierre de los ojos, pero las personas sí pueden conciliar el sueño”, afirmó.
Agregó que los casos en que las pestañas pueden afectar el sueño es cuando las personas son muy mayores de edad o en momentos en que un individuo esté sufriendo de entropión, que es cuando el párpado tiende a debilitarse.
El entropión es un trastorno en que el párpado se dobla hacia adentro y hace que las pestañas y la piel froten contra la superficie del ojo, lo que causa molestia, señaló el galeno.
“Cuando una persona tiene este tipo de trastorno provoca que el párpado se vaya hacia adentro y, es en ese momento cuando las pestañas suelen causar molestias para dormir”, detalló el autor de la columna de Historia de la Medicina Dominicana en el periódico El Caribe.
Otro mito que algunas personas tienen es que las pestañas que se desprenden no vuelven a salir, en este punto el especialista resaltó que, “si nos las quitamos, ellas vuelven a salir, pero tardan un tiempo de uno o dos meses”.
“No es normal que las pestañas se caigan en masa, debido a que suelen desprenderse siempre y cuando el ojo esté pasando por algún problema, como cuando el ojo tiene un exceso de grasa o la persona sufre de tiroides, entre otras patologías”, subrayó.
Lo que sí es normal, según el doctor, es perder entre una y cinco pestañas por día. A veces, la pérdida de pestañas más rápida (conocida como madarosis) puede ser un síntoma de un problema de salud subyacente en el ojo o en otra parte del cuerpo.
La madarosis es una afección que puede afectar tanto a hombres como a mujeres, y se caracteriza por la pérdida de pelo en las cejas y/o las pestañas.
Promociones engañosas
Durante la conversación, Stern Díaz señaló las publicidades engañosas de los supuestos exámenes de la vista gratis que algunas ópticas anuncian. En las ópticas no ofrecen exámenes visuales sino de refracción, que solo son para detectar problemas de enfoque, no de enfermedades visuales.
“Si esa persona no va al oftalmólogo se expone a que la posible afección que tenga no sea tratada. Primero se debe ir al oftalmólogo y luego a la óptica, pero los dominicanos lo hacen al revés”, declaró.
Pestañas postizas
En cuanto a las extensiones de pestañas que son cada vez más populares y cotizadas, el experto en el órgano visor declaró que estas extensiones no son dañinas siempre y cuando el ojo no tenga una enfermedad base. “Si el ojo tiene alguna infección de base las pestañas postizas pueden llegar a molestar, de lo contrario, este cuerpo extraño no hace daño”.
Enfermedades por desprenderse las pestañas
Las pestañas son más que simples flecos cosméticos, debido a que estos folículos crecen, se caen y se reemplazan en un ciclo natural cada seis a 10 semanas.
Durante el desarrollo de estos ciclos y con el poco cuidado que algunos terminan por el uso de maquillaje, entre otros factores, se pueden llegar a desencadenar una serie de enfermedades que afectan a las pestañas. Tal es el caso, de la blefaritis, una condición que ocurre cuando las glándulas sebáceas obstruidas cerca de la base de las pestañas causan inflamación crónica y problemas en los folículos de las pestañas.
Además, esta patología provoca picazón o ardor que viene acompañado de enrojecimiento o hinchazón de los párpados. Otra enfermedad que puede llegar a causar el desprendimiento de pestañas es la tricotilomanía que es cuando la angustia emocional o psicológica hace que una persona se arranque las pestañas habitualmente.