Mientras un grupo los aclama para seguir en el timón, otro frente fijó este miércoles la postura de que ni Danilo Medina ni Charlie Mariotti deben seguir en la Presidencia y la Secretaría del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), respectivamente.
Carlos Amarante Baret, Domingo Contreras, José del Castillo Saviñón, entre otros dirigentes, respaldaron las declaraciones de Medina y Mariotti de que dejarían sus puestos para apoyar una reforma del partido, que incluye los estatutos y un rediseño de los comités Político (CP) y el Central (CC).
Durante una rueda de prensa, los miembros de los comités Político y Central indicaron que el PLD debe aprovechar el X Congreso Ordinario para analizar la fuga de 2.3 millones de votos en ocho años y «dar un giro de 180 grados para convertirse de nuevo en una opción de poder en los comicios electorales por venir».
En nombre del grupo, Amarante Baret fijó tres puntos claves en la transformación del PLD: el primero apoyar a Medina y a Mariotti en no postularse en los máximos cargos, a fin «de garantizar que el actual proceso concluya sin mayores traumas y podamos relanzar el partido».
El segundo punto es que la organización se desligue públicamente de quién haya violado los principios éticos de su fundador, el profesor Juan Bosch.
Y el tercer planteamiento es que del X Congreso debe salir un PLD que reconecte con la sociedad y se escojan dirigentes que elaboren políticas públicas a favor de la sociedad. «…un partido que retome sus métodos de trabajo, la crítica y la autocrítica permanente y que alimente sin tregua su mística».
El PLD que en su oportunidad, sus dirigentes calificaron como «la fábrica de presidentes», fue desplazado al tercer lugar en las elecciones pasadas, donde solo lograron 453,468 votos (10.39 %), detrás del ganador Partido Revolucionario Moderno (PRM) y de la Fuerza del Pueblo (FP) que caló al segundo lugar.
En el X Congreso, que comenzó el pasado fin de semana, Medina hizo un «mea culpa» de la derrota. Sin embargo, ambos no han reconfirmado que dejarán la gerencia y a lo interno han surgido grupos que piden su permanencia.