Santo Domingo.- El concierto de Pavel Núñez y su BipolarBand en el Hard Rock Café se desarrolló como una travesía emocional, donde cada canción funcionó como un capítulo de una historia íntima compartida con el público. Desde los primeros acordes de “Lo que te gusta”, a las 10:25 p.m., el cantautor estableció el tono de una noche gobernada por la entrega total. El tema abrió el espectáculo con una declaración de amor sin reservas, mientras la banda construía un clima cálido que se mantuvo durante todo el evento, producido ejecutivamente por Ricky Nadal y con producción artística de Concepto Atariva SDQ, liderada por Fiora Cruz Carretero.
Con “Fiesta para dos”, el lugar se transformó en un salón donde la música era pareja, memoria y despedida. Pavel narró con voz y cuerpo la historia de un amor que comienza iluminado y termina en silencio. A lo largo de la noche se rindió tributo a Johnny Ventura, Rubby Pérez, Víctor Víctor y Diomedes Núñez, entre otros referentes de la música dominicana.

La BipolarBand, precisa y elegante, acompañó cada giro emocional con arreglos que integraron jazz, bolero, balada, canción urbana y tropical. La agrupación está integrada por Vicky María Concepción (coros), Álvaro Dinzey (piano), Jean Cuevas (teclado y acordeón), Otoniel Nicolás (batería), Félix Antuna y Johnny Martínez (percusión), Junior Féliz (guitarra), David Vásquez (bajo), Máximo Núñez y Andrés González Díaz (trompetas), Luis Armando Rengel (trombón), Remy Vargas y Windel Sax (saxofones).
La madurez musical de Pavel Núñez se manifestó con una libertad artística que le permitió transitar sin esfuerzo del bolero y la balada a la bachata, del merengue a la salsa. Esta versatilidad ofreció una puesta en escena distinta a lo presentado antes por el cantautor.
Antes de “Ay mujer”, Pavel citó a Silvio Rodríguez y a Juan Luis Guerra para hablar del amor sin cobardía, y entonces cantó. El tema se elevó como uno de los momentos más intensos del concierto.
El espectáculo avanzó entre confidencias y una dosis precisa de humor. En uno de los diálogos, recordó su infancia y la admiración por Dionis Fernández, reflexionando sobre figuras del merengue que, a su juicio, no siempre han recibido el reconocimiento justo. Acto seguido, interpretó “Loco loco”, provocando baile y risas.
Canciones como “Me desarmo”, “Bethania”, “Quédate” y “Santiago de frente” reforzaron el carácter confesional del concierto. En “Hoy me doy cuenta” y “Y así”, el merengue típico se convirtió en reflexión bailada.
El bloque romántico alcanzó uno de sus picos con “Me muero por ella” y “Te quiero”, interpretadas con una entrega que cautivó al auditorio. La BipolarBand mostró aquí toda su versatilidad, pasando de la balada al son.
El giro salsero llegó con “Hasta el sol de hoy”, precedido por una reflexión sobre las llamadas largas del amor no correspondido. Salsa y despecho coexistieron sin contradicción.
En la recta final, la energía contagiosa de “Buscando guayaba” atrapó al público entre bailes y coros colectivos. “Te di”, primero a guitarra y luego en versión típica, selló la complicidad.
El cierre, con un medley salsero y otro dedicado al repertorio de Sergio Vargas, fue pura celebración. El público no se desconectó hasta las 12:30 de la madrugada, luego de más de dos horas de música.
El concierto contó con el respaldo de Claro, Ayuntamiento del Distrito Nacional, Color Visión y el Grupo López, a través de Disco 106, Escape 88.9 y Fuego 90, así como aliados Rental Vision, La Oreja Media Group, Quesqueya y Dominicana FM.
Este evento se inscribe dentro de un año significativo para el cantautor. Desde inicios de 2025, Pavel Núñez ha estado celebrando sus 25 años de carrera, con una residencia de cuatro meses en Casa de Teatro, titulada “Como todo empezó, 25 años más tarde”, y un concierto el pasado 25 de julio en el Teatro La Fiesta del hotel Jaragua, con el que festejó dos décadas de su disco Atlantis.
Pavel Núñez y su BipolarBand cierran este ciclo como una apuesta que amplía su perfil artístico y abre puertas a nuevos escenarios, incluyendo espacios corporativos y celebraciones privadas, sin renunciar a su esencia.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**


