Santo Domingo, República Dominicana.– Santiago Matías, creador del proyecto “La Casa de Alofoke”, confirmó que todos los participantes del reality show fueron sometidos a evaluaciones psiquiátricas y psicológicas detalladas antes de ingresar a la vivienda donde permanecerán durante un mes.

La información fue ofrecida por el CEO de Alofoke Media Group la tarde de este lunes en el programa Sin Filtro Radio Show. Matías explicó que el objetivo de este proceso era garantizar un entorno controlado y anticipar posibles situaciones que pudieran surgir en un formato que promete ser uno de los más vistos en transmisiones vía streaming.

Durante su intervención, señaló que, aunque tuvo interés personal en incluir a ciertos “personajes”, la decisión final estuvo en manos de un equipo de producción especializado que contó con la participación de psiquiatras y psicólogos. Entre ellos mencionó al doctor Héctor Guerrero Heredia y a la doctora Alexandra Hichez, a quienes describió como referentes en el área de la salud mental.
Matías indicó que estos profesionales analizaron a cada aspirante con el propósito de identificar perfiles que pudieran representar un riesgo dentro de la casa. Comentó que, durante las revisiones, los especialistas advirtieron casos como “mira ese te puede explotar en este momento” o la posibilidad de que alguien pudiera “agarrar un cuchillo de la cocina”. Precisó que, a raíz de estos hallazgos, algunos candidatos fueron descartados.
La producción considera estas medidas esenciales debido a que la convivencia será continua, con participantes aislados sin acceso a dispositivos electrónicos, teléfonos, audífonos, cigarrillos ni vapes, lo que requiere altos niveles de resistencia y capacidad de adaptación. Según Matías, la meta es mantener un clima de entretenimiento que no sea “sano”, pero tampoco “supertóxico”.
El productor adelantó que se esperan momentos “muy intensos”, aunque se buscará evitar que se crucen límites o que se falte al respeto a las personas que confiaron en formar parte del proyecto.
Otro aspecto abordado por Matías fue la diferencia entre contratar al “personaje” o a la “persona” detrás de la imagen pública. Señaló que las evaluaciones psiquiátricas fueron clave para conocer cómo reaccionaría realmente cada concursante bajo presión, más allá de su proyección mediática, durante el encierro y la exposición constante del formato.


