Redacción.- El papa Francisco hizo hoy un “llamamiento urgente” para evitar “una espiral de violencia con el riesgo de arrastrar a Oriente Medio a un conflicto bélico aún mayor” y pidió a la comunidad internacional que ayude a israelíes y palestinos a vivir en “dos Estados vecinos”. Esto en relación al ataque de Irán contra Israel.
“Hago un llamamiento urgente para que se detengan todas las acciones que pueden alimentar una espiral de violencia con el riesgo de llevar a Oriente Medio a un conflicto aún mayor. Nadie debe amenazar la existencia de otro”, dijo el pontífice.
«No más guerra, no más atentados, no más violencia, sí al diálogo y sí a la paz». La voz del Papa es solemne, como en todas las ocasiones en que resuena en una coyuntura crucial para el mundo. En plena tensión internacional por una escalada del conflicto en el polvorín de Oriente Medio, tras el ataque de anoche de Teherán a Israel con un enjambre de cientos de drones y misiles de crucero lanzados en tres oleadas, el Papa, desde la ventana del Palacio Apostólico al final del Regina Caeli, vuelve a lanzar un «sentido» llamamiento -como él mismo lo define- a la paz y a la negociación.
El Papa Francisco, como siempre desde el estallido del conflicto, renueva el llamamiento para liberar «inmediatamente» a los rehenes israelíes secuestrados hace seis meses y en manos de Hamás. Entre ellos había mujeres y niños. Un grupo de familiares el Pontífice los recibió el pasado lunes en el Palacio Apostólico. Por último, hizo un llamamiento a todos los creyentes, pidiéndoles que nunca dejen de elevar a Dios una súplica por la paz.