Por: Sandy Cuevas

SANTO DOMINGO. – Con un llamado a vivir el sacerdocio en comunión y en rechazo al individualismo, el arzobispo metropolitano de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria Acosta, presidió este jueves la Misa Crismal en la Catedral Primada, donde decenas de sacerdotes renovaron sus votos ante el pueblo de Dios.
Durante su homilía, monseñor Ozoria exhortó a los sacerdotes a ser signos vivos de comunión y fraternidad dentro de la Iglesia, insistiendo en que la misión del clero debe estar marcada por la entrega, la solidaridad y el trabajo conjunto con los fieles laicos.
En su mensaje, insistió en que el individualismo es una amenaza que también se manifiesta dentro de la Iglesia y que solo puede ser contrarrestado con unidad, humildad y espíritu de servicio. El arzobispo aseguró que la comunión no es solo un ideal, sino un mandato de Cristo que debe vivirse desde lo cotidiano, en la colaboración fraterna y en la corresponsabilidad pastoral. Recordó que el Concilio Vaticano II definió a la Iglesia como “ministerio de comunión”, principio que debe guiar toda acción eclesial.
Al recordar la tragedia ocurrida recientemente en la discoteca Jet Set, valoró la presencia de sacerdotes en el lugar de la tragedia, quienes acudieron a consolar y brindar asistencia espiritual en medio del dolor. También reconoció el esfuerzo de los sacerdotes que han ofrecido misas por las víctimas, aun cuando esto coincidió con el cierre de la Cuaresma, resaltando el sacrificio como una muestra de entrega pastoral.
La Misa Crismal forma parte de las celebraciones más importantes de la Semana Santa y en ella se consagran los óleos sagrados.


