La congresista Marjorie Taylor Greene (republicana por Georgia) negó enfáticamente el domingo un informe que sugería su consideración de postularse a la Casa Blanca en 2028, escribiendo en redes sociales: “No me postulo para presidente y nunca dije que quisiera, y solo me reía cuando alguien lo mencionaba”.
Greene, de 51 años, quien anunció sorpresivamente su renuncia el viernes por la noche, respondía a un informe del sábado de la revista Time que indicaba que “ha dicho en privado a aliados que ha considerado postularse para presidente en 2028”, citando a “dos personas que han hablado con ella directamente sobre la prospectiva y tres otros familiarizados con su pensamiento”.
“Esto es una mentira completa y lo inventaron porque ni siquiera pueden citar los nombres de las personas que alegan lo dijeron”, insistió Greene. “Eso no es periodismo, se llama mentir”.
La congresista anunció su renuncia, efectiva el 5 de enero, después de repetidos enfrentamientos con el expresidente Donald Trump, más recientemente sobre la liberación de archivos del Departamento de Justicia relacionados con el caso del difunto Jeffrey Epstein. Tras la solicitud de Greene de liberación completa de los archivos, Trump retiró su endoso para otro período en la Cámara, calificándola de “chiflada” y “lunática”.
Un asistente republicano de la Cámara describió el anuncio de renuncia de Greene como un movimiento “vindictivo” para deliberadamente “perjudicar” a la mayoría republicana en la Cámara, que actualmente se mantiene en 219-213 con tres vacantes.
“MTG se fue antes que Pelosi”, señaló esta persona, refiriéndose a la expresidenta demócrata de la Cámara que anunció a principios de mes que no buscaría otro mandato.
“Si creíste esos titulares, todavía estás siendo adormecido diariamente en psicosis por el Complejo Industrial Político que siempre tiene una agenda cuando hace algo como esto”, dijo Greene más adelante en su publicación.
“Postularse para presidente requiere viajar por todo el país, rogando por donaciones todo el día todos los días para recaudar cientos de millones de dólares, argumentando puntos políticos todos los días hasta el agotamiento, destruyendo tu salud y sin tener vida personal para intentar obtener suficientes votos para convertirte en presidente, todo para ir a trabajar en un sistema que se niega a resolver cualquiera de los problemas de Estados Unidos.
El hecho de que tendría que pasar por todo eso pero estaría totalmente bloqueada para arreglar algo es exactamente por qué nunca lo haría”.
REDACCIÓN FV MEDIOS