El CEO de OpenAI, Sam Altman, recibió una citación judicial durante su conversación pública con Steve Kerr, entrenador de Golden State Warriors, en el Sydney Goldstein Theater de San Francisco. Un hombre saltó al escenario minutos después de iniciado el evento —que tenía localidades agotadas— extendiendo un documento y anunciando que portaba una citación para Altman, según reportó SFGATE.
El organizador cívico Manny Yekutiel interceptó inmediatamente al individuo y entregó el papel a un guardia de seguridad del teatro, quien escoltó al intruso fuera del recinto mientras el público abucheaba. Altman permaneció sentado y mostró signos de sobresalto, pero salió ileso del incidente.

Al día siguiente, la Oficina del Defensor Público de San Francisco confirmó que el hombre era uno de sus investigadores. “Un investigador de la Oficina del Defensor Público de San Francisco entregó legalmente una citación al Sr. Altman porque es un testigo potencial en un caso penal pendiente”, declaró la portavoz Valerie Ibarra a SFGATE.
El grupo activista Stop AI se atribuyó la responsabilidad del incidente en línea. En una publicación en X, el grupo escribió: “Nuestro defensor público citó exitosamente a Sam Altman para que comparezca en nuestro juicio donde seremos juzgados por bloquear pacíficamente la puerta principal de OpenAI en múltiples ocasiones”.
Lucie Faulknor, gerente del teatro, dijo al San Francisco Standard que personalmente acompañó al hombre fuera y que parecía tranquilo, afirmando que había cumplido con lo que necesitaba hacer. Yekutiel comentó posteriormente que pensó que el incidente parecía un truco, notando que el sobre estaba cubierto de garabatos y el hombre aparentaba estar disfrazado.
La interrupción opacó brevemente la amplia charla de Altman, que cubrió temas como la desigualdad de riqueza, el futuro de la inteligencia artificial y las políticas de contenido controvertidas de la empresa. Durante la discusión, Altman abordó las críticas sobre su tuit del 14 de octubre, donde celebraba que ChatGPT podría generar material erótico para usuarios adultos verificados, calificándolo como “uno de mis errores más tontos del año”.
Señaló que el cambio era parte del esfuerzo de OpenAI para dar a los adultos “un gran grado de libertad individual”, pero admitió: “Ojalá hubiera usado un ejemplo diferente”. La actualización de la política, anunciada un día después de que el gobernador Gavin Newsom vetara un proyecto de ley que habría impuesto nuevos límites a las herramientas de IA para proteger a los menores, generó burlas y críticas inmediatas de legisladores y padres.
Altman afirmó que respalda la decisión de la empresa de levantar restricciones para adultos verificados, pero reconoció que su mensaje “no estuvo bien pensado”. Agregó que OpenAI continuaría bloqueando material relacionado con salud mental o autolesiones, pero no “trazaría líneas morales” para adultos que consienten.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**


