Las protestas se intensificaron en Oklahoma después de que Jesse Butler, un adolescente acusado de múltiples agresiones sexuales violentas, evitara la prisión bajo la ley de delincuente juvenil del estado. Más de un centenar de personas se congregaron frente al Tribunal del Condado de Payne portando carteles que exigían justicia, según reportó The Oklahoman.
La organización Ponca Tribal Victim Services manifestó en Facebook su solidaridad con las víctimas: “Jesse Butler debe rendir cuentas. La jueza Susan Worthington debería ser inhabilitada”.
Butler, de 18 años, se declaró sin oposición a múltiples cargos de agresión sexual y recibió una sentencia de 78 años que fue suspendida, permitiéndole permanecer en libertad mientras complete un programa de rehabilitación supervisado por el tribunal.
Las escuelas públicas de Stillwater implementaron medidas de seguridad preventivas, designando áreas específicas para manifestantes y medios, además de incrementar la presencia policial en los campus. El distrito escolar condenó “la agresión sexual y la violencia en todas sus formas”.
Butler, exestudiante de Stillwater, tiene prohibido el acceso a instalaciones y eventos escolares. La policía local investiga comunicaciones recibidas respecto a su situación académica, aunque destacó que no se han identificado amenazas específicas.
Un video de cámara corporal publicado recientemente muestra el arresto de Butler el año pasado, cuando tenía 17 años. Se declaró sin oposición a 10 cargos relacionados con violación y uno por violar una orden de protección.
Familiares de las víctimas y miembros de la comunidad han expresado su indignación por la sentencia. Algunos manifestantes hicieron referencia a la conexión de Butler con la Universidad Estatal de Oklahoma, donde su padre se desempeñó como director de operaciones de fútbol.
Una madre declaró a KOCO: “El sistema de justicia defraudó a mi hija, quien tuvo que demostrar repetidamente que era la víctima”. Según documentos policiales, una de las afectadas afirmó que Butler la estranguló hasta casi causarle la muerte.
La Fiscalía del Condado de Payne justificó el procesamiento bajo la ley juvenil por la edad del acusado al momento de los delitos, lo que permite supervisión hasta sus 19 años y ofrece oportunidad de rehabilitación.
El representante estatal Justin “JJ” Humphrey calificó el fallo de “inaceptable” y anunció que solicitará una revisión del caso. Butler permanece bajo supervisión de la Oficina de Asuntos Juveniles, con obligación de cumplir terapia, servicio comunitario y restricciones específicas. Si incumple los términos, podría enfrentar la sentencia completa de 78 años. Su próxima audiencia está programada para el 8 de diciembre.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**