ATLANTA — Karl-Anthony Towns comenzó el trabajo. OG Anunoby lo terminó. Después de que los Knicks desperdiciaran una ventaja de 18 puntos contra los Hawks, Anunoby llegó con las dos jugadas más importantes de la victoria 128-125 del sábado: los tiros libres decisivos con 29.6 segundos por jugar, seguidos de un robo a Trae Young en la siguiente posesión.
Al final, Anunoby, quien tuvo problemas con su tiro durante gran parte de la noche, anotó cuatro tiros libres, consiguió un robo y dos rebotes en los últimos 30 segundos. Los Knicks celebraron cuando el triple de Nickeil Alexander-Walker que pudo empatar el juego rebotó en el aro al sonar la bocina.
“Se lo he dicho. OG es un All-Star si quiere serlo”, dijo el entrenador Mike Brown. “Con su tamaño, envergadura, fuerza, atletismo y sentido del juego, puede hacer mucho ahí fuera. Solo tiene que imponer su voluntad en cada jugada. Fue fabuloso. En los momentos clave, fue increíble”.
Antes de ese final, Towns fue el héroe con 36 puntos y 16 rebotes, dominando la alineación pequeña de los Hawks. Towns se dio un festín desde la línea de tiros libres, siendo recompensado con silbatos por su estilo agresivo y controlado al conectar 17 de 18 tiros libres. Towns también capturó rebotes y anotó tres triples, una actuación que se hizo necesaria porque Jalen Brunson no estuvo en su mejor nivel All-NBA.
“Me encantó [la agresividad de Towns]”, dijo Brown. “Hablé con él frente al equipo. Cuando pone pantalla y rueda, somos un equipo diferente porque la presión que ejerce sobre la defensa en su rodada es increíble. Porque si atrapa en el bolsillo, se acabó. Lo van a foular o lo van a foular y va a anotar porque su impulso va en esa dirección y es muy rápido. Es un monstruo cuando rueda”.
Brunson, mientras tanto, anotó 34 puntos pero necesitó 29 tiros, y también cometió una costosa pérdida con menos de un minuto por jugar al ser despojado del balón por Alexander-Walker.
Hubiera sido una fea caída después de que los Knicks lideraran por 18 a mitad del tercer cuarto y por 10 al inicio del cuarto.
Los Hawks (15-18) reaccionaron en el cuarto periodo pero cayeron en su sexta derrota consecutiva, todas sin Kristaps Porzingis. El ex Knick sigue fuera por una enfermedad tras ser diagnosticado la temporada pasada con un trastorno que causa frecuencia cardíaca rápida, entre otros síntomas.
Incluso dejando a un lado la ausencia prolongada de Porzingis, Atlanta es una decepción y ha sido vinculada a un posible intercambio por Anthony Davis de Dallas.
¿Los Knicks? Siguen avanzando con un récord de 22-9, aún como favoritos para ganar la Conferencia Este tras ganar ocho de sus últimos 10 partidos. También están navegando lesiones y experimentos en la alineación.
Con Josh Hart y Miles McBride ambos fuera por esguinces de tobillo el sábado, Brown alteró su rotación de manera sorprendente. El novato Mohamed Diawara comenzó por segunda vez esta temporada, tomando el lugar de Hart, quien perderá al menos dos juegos más.
Mucho más sorprendente, el primer suplente de Brown fue el jugador con contrato dual Kevin McCullar Jr., quien llegaba al sábado con solo 10 minutos totales esta temporada.
Resultó ser un movimiento inteligente de Brown, quien vio a McCullar anotar seis puntos y capturar seis rebotes en la primera mitad. McCullar, cuya proyección al salir de la universidad era comparada con Hart, se convirtió en una revelación mientras Nueva York tomaba una ventaja de 13 puntos al descanso.
Así que los Knicks no tenían a Josh Hart, pero obtuvieron suficiente de su doble. McCullar, cuya carrera en la NBA se estancó la temporada pasada por un problema persistente en la rodilla, terminó con 13 puntos en 23 minutos con 4 de 7 en tiros y ocho rebotes, incluidos cuatro ofensivos. Incluso realizó una zambullida al estilo Hart cerca de la banca por un balón suelto.
“[McCullar] fue fantástico”, dijo Towns, “y fue exactamente lo que decimos cuando hablamos de que el siguiente hombre debe estar listo, y la banca fue una chispa cuando realmente la necesitábamos para ganar el juego”.
Se convirtió en una actuación complementaria al juego completo de Towns y a las heroicidades de último minuto de Anunoby.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**