Redacción.- En medio de las crecientes críticas sobre los vínculos entre celebridades y la fallida campaña presidencial de Kamala Harris, un miembro clave de su equipo, Adrienne Elrod, ha salido al paso de las acusaciones que sugieren que a artistas y figuras públicas se les pagaron grandes sumas para respaldar a la vicepresidenta. Elrod, quien fue portavoz principal de la campaña, desmintió tajantemente estas alegaciones en una entrevista con Deadline.
«Nunca hemos pagado a ningún artista ni intérprete. Nunca hemos pagado honorarios a esa persona», afirmó Elrod, desmarcándose de las acusaciones que apuntan a contratos millonarios para influencias en los eventos de campaña. Sin embargo, destacó que, aunque la campaña no paga directamente a las celebridades, está obligada a cubrir ciertos «costes adicionales» asociados con los eventos, tales como los viajes o el alojamiento de miembros de las bandas que puedan participar.
La portavoz explicó que estos gastos se ajustan a las estrictas normas impuestas por la Comisión Federal Electoral (FEC), que regula el uso de fondos en campañas políticas. En este sentido, Elrod recalcó que la campaña de Harris ha cumplido rigurosamente con estas reglas, las cuales prohíben el pago directo de celebridades sin un reembolso correspondiente o la declaración de esos gastos como contribuciones en especie. Las contribuciones en especie están sujetas a límites legales de financiación.
La controversia se intensificó luego de que Oprah Winfrey revelara esta semana que su empresa de producción recibió una tarifa de $1 millón para organizar un evento de ayuntamiento en apoyo a Harris, lo que generó especulaciones sobre la naturaleza de las colaboraciones entre celebridades y la campaña.
El enfoque de Elrod refuerza el argumento de que, si bien la campaña no distribuyó honorarios directamente a las celebridades, las leyes de financiación de campañas políticas son claras y se respetaron en cada uno de los eventos respaldados por figuras públicas de alto perfil.
