Al parecer a la gobernadora demócrata de Nueva York, Kathy Hochul, se le pidió esta tarde que abandonara el velorio en Long Island del oficial NYPD Jonathan Diller, abatido el lunes en Queens (NYC).
Hochul llegó a la funeraria en Massapequa, ciudad donde vivía Diller, para el segundo día de velorio alrededor de la 1:45 p.m. del Viernes Santo, pero sólo estuvo en el lugar unos 10 minutos antes de que aparentemente le pidieran que se fuera, destacó New York Post.
Ayer el ex mandatario republicano Donald Trump sí fue recibido. Mientras, algunos han criticado al presidente Joe Biden por no ir al funeral, si bien estaba en Nueva York para un acto millonario de recaudación de fondos junto a Barack Obama y Bill Clinton.
Los políticos con discursos “anti policías” deberían mantenerse alejados de los funerales de Diller, programados ayer y hoy en Long Island y mañana sábado en Manhattan, ya había advertido la Asociación Benevolente de Sargentos (SBA) de NYPD.
Ese mensaje estuvo específicamente dirigido a la presidenta del Concejo Municipal, Adrienne Adams, y al defensor público Jumaane Williams. La SBA es el segundo sindicato policial más grande de NYC y el 5to a nivel nacional.
“Adrienne Adams, Jumaane Williams y sus compañeros deberían quedarse en casa. Detestan a los policías y no aprecian lo que hacen. Deberían quedarse en casa y no fingir que están de duelo. Han causado suficiente angustia y destrucción”, declaró enfático al New York Post el presidente de la SBA, Vincent Vallelong.
Son tan moralmente responsables de la muerte del oficial Diller como el criminal de carrera que apretó el gatillo”
Miller (31) murió baleado la tarde del lunes durante su jornada laboral, en una simple parada de tráfico en Queens. Dos hombres con antecedentes penales fueron detenidos por el dramático caso que ha sacudido a Nueva York esta semana y avivado las críticas al sistema penal. La reforma penal estatal activada en 2020 ha sido desde entonces vinculada con la impunidad y el auge del crimen, según líderes de NYPD y otros críticos.
Las declaraciones del líder gremial siguen a una carta mordaz que la SBA -sindicato que representa a los sargentos de la policía de Nueva York- envió esta semana a los miembros del Concejo Municipal, mayormente Demócrata, por publicar declaraciones de simpatía “huecas” y “falsas” sobre el asesinato de Diller, y diciendo que su presencia no sería requerida en el funeral del sábado.
“Son tan moralmente responsables de la muerte del oficial Diller como el criminal de carrera que apretó el gatillo”, dijo la mordaz carta, refiriéndose a Guy Rivera, un ex convicto que, según la policía, lo baleó fatalmente.
Vallelong acusó al Concejo Municipal y a “muchos fiscales” de ser “cómplices de esta destrucción total de la sociedad civilizada en Nueva York”, según la incisiva carta.
Williams fue una de las voces principales para “desfinanciar” a la policía de Nueva York durante las protestas contra la brutalidad policial de 2020 que sacudieron la ciudad tras la muerte de George Floyd en Minnesota, llegando incluso a amenazar con impedir que el entonces alcalde Bill de Blasio recaudara impuestos a la propiedad si no congelaba la contratación y sacara a los policías de las escuelas.
“Lo que pasó es un acontecimiento muy, muy triste, algo tan horrible”, dijo Trump ayer a los periodistas después de asistir al funeral de Diller en Long Island. “Tenemos que volver a la ley y el orden. Tenemos que hacer muchas cosas de manera diferente, porque esto no está funcionando”, insistió y “aprovechó el velorio para centrarse en un mensaje frecuente en la temporada de campaña sobre el crimen y la seguridad pública”, resumió ABC News.