Una corte de EEUU negó la libertad bajo fianza del serbio David Knezevich, el esposo de Ana María Knezevich, la colombo-estadounidense que desapareció el pasado mes febrero en Madrid y que se sospecha que fue asesinada por su marido. Knezevich, de 36 años y detenido en Miami desde el 4 de mayo pasado, se ha declarado no culpable de los cargos de secuestro que afronta en la Justicia estadounidense.
Pese a esto, el juez Edwin Torres ha rechazado la petición de libertad de la defensa del serbio al considerar que hay peligro de que se fugue. “La evidencia presentada (…) respalda la conclusión original del tribunal de que el acusado presenta un grave riesgo de fuga dado el astuto nivel de engaño que ha demostrado como parte del delito en el que se alega que participó”, escribió el juez.
El comienzo del juicio en Miami está previsto para el próximo 21 de octubre y se espera que dure dos semanas, ya que solo se le atribuyen los cargos de secuestro al no haber sido hallado el cuerpo de la mujer, de 40 años.
Knezevich fue arrestado cuando llegaba de Serbia y de donde es originario, por su posible implicación en la desaparición de su esposa. La mujer, de origen colombiano y nacionalidad estadounidense -radicada en Fort Lauderdale-, llegó a Madrid el pasado diciembre en pleno proceso de divorcio. La última noticia que tuvieron sus allegados es que estaba buscando un nuevo apartamento de alquiler con la expectativa de quedarse en la capital española a largo plazo.
Búsqueda en España e Italia
Tras las investigaciones de la Policía Nacional en colaboración con el FBI, aparecieron imágenes de una cámara de seguridad en las que se ve
a un hombre que llevaba un casco de motociclista rociando con pintura las cámaras de seguridad del edificio de apartamentos en Madrid donde ella se alojaba. Ese hombre fue identificado después como Knezevich.
Al día siguiente, dos amigas de Ana María recibieron mensajes de texto separados, uno en inglés y otro en español, desde su teléfono diciendo que planeaba irse unos días con un hombre que acababa de conocer, lo que despertó sus sospechas.
Tras esto y también después de la detención del hombre, los cuerpos de seguridad se afanaron en buscar a la joven en el camino de vuelta que el serbio hizo hasta su país en coche desde Madrid. Así, la Policía Nacional rastreó provincias como Soria o Aragón. Después, se ha buscado en la provincia italiana de Vicenza.
Allí, la Policía sospecha que el detenido pudo tener un cómplice en la localidad de Cogollo que le ayudó a ocultar el cadáver de su exmujer, por lo que estuvieron buscando en terrenos boscosos sin éxito.
